Völkischer Beobachter

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panchopg
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Völkischer Beobachter

Mensaje por panchopg » Sab Jun 10, 2006 1:43 am

El Völkischer Beobachter (“observador del pueblo”) era el periódico oficial del partido nacional socialista de los trabajadores alemanes (NSDAP) A contar de 1920.

En un comienzo su publicacion era semanal. Desde el 8 de febrero de 1923. comienza su publicacion diaria bajo el rotulo de el “periodico de lucha del movimiento socialista nacional de la gran Alemania”.
Esta publicacion tiene su origen en el Münchner Beobachter (“observador”), de la ciudad de Munich que en 1918 fue adquirido por la sociedad de Thule y en agosto de 1919 fue retitulado como Völkischer Beobachter.
El NSDAP lo compró en diciembre de 1920 en la iniciativa de Dietrich Eckart, que se convirtió en su primer redactor.

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Dietrich Eckart Primer redactor

La circulación del pariodico fue inicialmente de cerca de 8.000 ejemplares, que aumento en 25.000 ejemplares en el otoño de 1923 debido a la fuerte demanda durante la ocupación del Ruhr. Ese año Alfred Rosenberg asumio como redactor.

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Alfred Rosenberg

Como el NSDAP fue prohibido después de el Putsh de la cerveceria el 9 de noviembre de 1923, El Völkischer Beobachter dejo de circular, sin embargo con la refoundacion del partido el 26 de febrero de 1925 el periodico continuo su circulacion. elevandose el tiraje junto a la popularidad del movimiento nazi, alcanzando más de 120.000 ejemplares en 1931 y 1.7 millones de ejemplares antes de 1944.A finales de abril de 1945, algunos días antes de que la entrega alemana en la Segunda Guerra Mundial, el Völkischer Beobachter deja definitivamente de publicarse.

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Formato de 1923

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Formato de 1933 (Me queda la duda)

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Formato de 1941

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Titular informando el incendio al Reichstag

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Titular anunciando el discurso de Hitler ante el Reichstag
Valiente es aquel que no toma nota de su miedo. (G. Patton)
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fangio
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Mensaje por fangio » Mié Jul 19, 2006 2:13 am

Una de las últimas ediciones del Völkischer Beobachter, la del 20 de Abril de 1945, cumpleaños número 56 del Führer. El diario lo titula "el hombre del siglo", diez días antes de suicidarse.

Völkischer Beobachter - 20 de Abril 1945
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Fuente: http://en.wikipedia.org/wiki/Volkischer_Beobachter

Saludos,

FANGIO

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Eckart
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Mensaje por Eckart » Lun Oct 30, 2006 1:07 am

Antes de ser conocido como Völkischer Beobachter, esta publicación existió con otros nombres y otros dueños distintos al NSDAP. Sus orígenes se remontan al año 1867, cuando en noviembre aparece la publicación quincenal Merkur. El 2 de enero de 1887, la publicación cambia su nombre por el de Münchner Beobachter.

A principio de 1900, Franz Xaver Josef Eher se convierte en redactor y co-editor del periódico. Durante 1901 Eher tuvo que dirigir el periódico él solo, y como consecuencia, el 2 de diciembre de 1901, nace la Franz Eher Verlag (Editorial Franz Eher).

En junio de 1918 se produciría el fallecimiento de Eher, quedando su viuda como directora de la editorial. En agosto de 1918, Rudolf von Sebottendordff se convierte en redactor del periódico y se sirve de este para hacer propaganda nacionalista, convirtiéndolo en órgano extraoficial de la sociedad Thule que él mismo había formado con anterioridad. El 14 de septiembre, una amiga de Sebottendorff, Käthe Bierbaumer, se convierte en la propietaria de la editorial. Dieciséis días más tarde la hermana de Sebottendorff formaría sociedad con ella.

Unos meses más tarde, con la colaboración del periodista también nacionalista Karl Harrer, el periódico adopta otro nombre con la idea de atraer más clientes: Münchner Beobachter und Sportblatt (Observador muniqués y hoja deportiva), aunque su subtítulo no dejaba lugar a dudas respecto a su contenido: “Periódico independiente de política nacional y völkisch”. Durante los últimos meses de 1918 y los primeros de 1919, llegan a la redacción del periódico nuevos colaboradores, que poco a poco van dejando de lado a Sebottendorff.

En mayo de 1919, el periódico adopta el programa del Deutschsozialistischen Partei, partido creado en el norte de Alemania, pero sigue a abierto a la publicación de informaciones sobre otros movimientos nacionalistas. En diciembre, estando el periódico en plena quiebra, es comprado por el NSDAP gracias a las aportaciones económicas de la Reichswehr vía Ritter von Epp y otras aportaciones de particulares, que incluían la del presidente del partido Anton Drexler, quien sería propietario legal del periódico. En manos del NSDAP el nombre del periódico fue sustituido por el de Völkischer Beobachter.

Imagen Imagen

Fuentes:
http://www.historisches-lexikon-bayerns ... ikel_44346
Ian Kershaw, Hitler 1889-1936 (Ediciones Península, octubre de 1999), pag. 171

Un saludo.
«El conocimiento es mejor que la ignorancia; la historia es mejor que el mito».
Ian Kershaw

Akeno
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Mensaje por Akeno » Lun Abr 14, 2008 8:54 am

El Völksischer Beobachter representó la punta de lanza del imperio periodístico de Max Amann. Llegó a ser el primer periódico de lal historia del periodismo alemán que fue publicado simultáneamente en Munich, Berlín (a partir de 1933) y Viena (a partir de 1938). Además, se convirtió en el primer diario alemán que alcanzó la cifra de venta de un millón de ejemplares y que registró un crecimiento de diez a uno en otros tantos años (1932: 116.000; 1941: 1.192.500). Un hecho que contribuyó a este asombroso progreso fue que su director, Wilhelm Weiss, transformó en parte el primitivo "periódico de combate" en un vehículo de información. Mejoró el servicio de noticias y amplió el alcance de éstas. Pero la mayoría de los otros planes de Weiss para una reforma del diario se estrellaron contra las inflexibles negativas de Amann.

Fue la obstinación de su propietario, por ejemplo, lo que impidió que el primer periódico del país más poderoso de Europa no tuviera ni un solo corresponsal permanente en ninguna capital extranjera. Tampoco empleó el periódico, después de 1933, un vocabulario diferente, para adaptarse mejor a su nuevo status de equivalente alemán de The Times o Le Temps. Tanto en sus tiempos de apogeo como en los de oscuridad, el estilo del periódico consistió en una combinación de panfletarismo y pérfida mendacidad, como puede verse en esta información, de 1934, del suicidio de un antiguo diputado del Reichstag en un campo de concentración: "Aunque tratado con la misma tolerancia que todas las demás personas en custodia protectiva, se comportó de forma hostil y provocativa hacia el personal responsable".

En el principio nazi estaba el verbo; la letra impresa lo apoyaba, pero en un plano de supeditación. Una de las principales directivas de Goebbels a los periodistas era, en resumen, la siguiente: "El lector debe tener la impresión de que el que escribe es en realidad un hombre que está junto a él y que le habla". Como resultado de ello, las páginas de la prensa nazi exhalaban el ambiente de sus mítines masivos, un ambiente de sudor, cuero y sed de sangre, y el Völksischer Beobachter era poco más que un cartel disfrazado de periódico en sus primeros tiempos. Por ejemplo, los titulares de primera plana eran del tipo de: "EL QUERIDO DE LA DUEÑA DE UN BURDEL NOMBRADO PROFESOR UNIVERSITARIO" y utilizaba frecientemente epítetos como "reptiles" (para los miembros del gobierno de Weimar) y "cloaca parlamentaria" (para el Reichstag).

La verdadera razón del rápido y constante progreso del periódico (su circulación aumentó cada daño en 100.000 ejemplares) es sencillamente el hecho de que la suscripción al Völkischer Beobachter era a la vez consecuencia lógica de la afiliación al partido y signo de fidelidad política para los funcionarios y otros grupos sociales. Maestros de escuela, dirigentes de las Juventudes Hitlerianas, instructores de la Wehrmacht y profesores universitarios lo utilizaban como auxiliar básico de su tarea educativa y, los maestros no nazis se veían obligados a leerlos también, para abstenerse de criticar las redacciones en que sus alumnos copiaban palabra por palabra sus artículos editoriales. Los comentarios adversos acerca de tales redacciones fueron a veces expiados en campos de concentración.

Fuente: HISTORIA SOCIAL DEL III REICH. Richard Grunberger. Ediciones Destino 1974.

Saludos!

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