Schweinfurt

[V.Manstein]

14 de octubre de 1943, la aviación norteamericana realizó un "raid" contra las grandes plantas de cojinetes de Schweinfurt, en el sur de Alemania. Esa incursión dio lugar a uno de los encuentros más encarnizados de la guerra aérea. Vean el relato de dicha acción, publicado en la historia oficial de la aviación de los EE.UU.
"Tan pronto como la escolta de aparatos P-47 emprendió el regreso desde las proximidades de Aquisgrán (a unas 240 millas de la costa inglesa), la Luftwaffe hizo su aparición en fuerza y comenzó a acosar a las formaciones de bombarderos en una acción que sería continua hasta llegar al blanco y se prolongaría hasta la costa del Canal en el vuelo de retorno. La mayoría de las tácticas empleadas ese día por los cazas alemanes ya habían sido utilizadas con anterioridad ataques en formación, uso de cohetes y cañones, bombardeo contra aviones, concentración simultánea en un grupo y en los aviones rezagados, pero jamás hasta entonces había hecho el enemigo un empleo tan completo y coordinado de estas tácticas. Ciertamente el contraataque estaba tan bien planificado que dio origen a la sospecha de que el control de cazas alemán sabía de antemano la hora y objetivos de la acción... Sea como fuere es que la Luftwaffe cumplió una tarea sin precedentes por su magnitud, por la inteligencia con que fue planificada y la severidad con que se la llevó a cabo.
Los cazas atacaron ola tras ola. Como de costumbre, los ejemplares de cazas monomotores se lanzaron desde el frente, disparando sus cañones de 20 mm. y ametralladoras hasta estar muy cerca de la formación. Casi a continuación de los cazas monomotores, se hicieron presentes nutridas formaciones de cazas bimotores, que disparaban enormes cantidades de cohetes mediante equipos especiales instalados bajo las alas. Hacían blanco de sus proyectiles a las formaciones de bombarderos, generalmente, desde una distancia de 1.000 yardas y también desde la retaguardia; aprovechando la ventaja natural concedida a la puntería por los ataques traseros. Procediendo igual que los cazadores de patos, disparaban contra el avión guía sabiendo que la dispersión normal causada por las explosiones aumentaría la probabilidad de hacer impacto. Mientras tanto los cazas monomotores se reaprovisionaban y convergían desde todas las direcciones. Pronto eran seguidos por grupos de bimotores que se habían reabastecido de cohetes. Luego de consumir sus proyectiles, estos últimos recurrían con frecuencia a sus cañones y ametralladoras. Los aviones enemigos se concentraban en una formación a la vez, provocaban la desorganización mediante ataques de cohetes (que como los proyectiles antiaéreos eran más eficaces para este propósito que para la destrucción inmediata) y luego asestaban el golpe de gracia a los aparatos averiados mediante el fuego de su artillería. Un ala de combate de la 1º División de Bombardeo, que soportó el mayor peso del contraataque, fue barrida casi por completo mediante estas tácticas... La misión del 14 de octubre había demostrado que el precio de tan profundas penetraciones durante períodos de luz solar, sin disponer de escolta de cazas, era demasiado elevado para que se las llevara a cabo con frecuencia. Para hablar en términos concretos, había costado a la 8ª Fuerza Aérea, 60 aparatos B-17 con sus tripulaciones, sin mencionar los daños importantes sufridos por 17 aviones y las averías factibles de reparación de 121."

[Erich Hartmann]

¡Qué tema tan jugoso, amigo Manstein! Una derrota (con perdón) de la fuerza aérea aliada ya a finales del año 1943 en pleno corazón de Alemania. Sorprendente, sin duda.

Esta derrota fue el resultado de una cadena de errores estratégicos por parte de los aliados ya desde el año 1941. El principal de ellos, según la terminología de Kenneth Macksey, fue la "habitual evaluación errónea de los efectos del bombardeo estratégico y la obstinada adhesión británica a ese cálculo erróneo hasta bien avanzado 1941"

Las deficiencias de la teoría de bombardeo diurno ya habían quedado patentes tras el intento de aplicación del sistema de bombardeo de Hamburgo sobre Berlín. Entre el 23 de agosto y tres de septiembre de 1943, los raids lanzados sobre Berlín cosaron 126 aparatos de los 1447 enviados. Algunas incursiones, como la del 23 de agosto, fueron un grave desperdicio de fuerzas que pudieron emplearse en otros lugares con mayor eficacia, ya que de los 719 aviones enviados, sólo 625 llegaron a la zona de operaciones y 57 no regresaron. Los alemanes ya habían reaccionado al sistema Window con otro novedoso sistema de interceptación conocido como Wilde Sau. Dirigía los cazas (incluso los monomotores sin radar AI) hacia las oleadas de bombarderos para así permitirles luchar libremente sin control desde el suelo; y resultó ser un éxito.

Obviamente, el ínidice de bajas tenía un significado más importante que el simple recuento de resultados en comparación con los aciertos en los objetivos o los aviones enemigos destruidos. Era fundamental para una ofensiva continiada. Esto se puede aplicar tanto a los americanos como a los ingleses.

En esta situación, la RAF perdió 60 bombarderos en el ataque a las fábricas de aviones y rodamientos de bolas de Peenemunde, el 16 por ciento de la fuerza enviada. Hubo que hacer un alto, y hasta el 14 de octubre no se atrevieron a penetrar profundamente en Alemania para bombardear la fábrica de rodamientos de Schweinfurt. Lo hicieron sabiendo que la Luftwaffe podía reunir 800 cazas monomotores y 725 bimotores. Aquí se produjo el desastre: el bombardeo diurno era imposible de realizar sin escolta, tal y como los británicos lo habían hecho desde el principio.

La Luftwaffe no comenzó su ataque hasta que la escolta de cazas de corto radio de acción se hubo retirado. Derribaron 60 bombarderos, además de causar daños a 138 de los 291 aviones que habían despegadoLa derrota no podía ser contrarrestada con los 30 ó 40 cazas derribados (no los186 que se proclamaron)

Estos hechos supusieron un turning point en la guerra por los cielos de Europa, ya que los bombarderos diurnos no se intentarían de nuevo hasta que un caza fiable y de largo radio de acción estuviera disponible en cantidades considerables. El desastre de Schweinfurt incitó finalmente a Harris a lanzar lo que consideraba que sería la batalla crucial de la guerra, para la cual emplearíalos recursos completos del Mando de Bombarderos, además de la VIII fuerzaaérea del ejército, pero esa es ya otra historia.

Saludos cordiales

[Calígula]

El primer plan sobre Schweinfurt era mucho mas conciso de lo que lo parecia. La fuerza de ataque se iba a dividir en dos, cada una con un poderio similar a la otra. El primer grupo atacaria un blanco secundario, la fabrica de aviones de Messermicht en Regensburg, para despues realizar su viaje de regreso sin obstaculos hasta Africa del Norte. La segunda oleada saldria 10min mas tarde de la primera, y asi llegarian a Schweinfurt mientras los cazas alemanes estaban repostando en tierra, por la distraccion de la primera oleada. En el tiempo transcurrido desde el despegue de la primera oleada a la segunda en sus bases de Gran Bretaña, se levanto de repente una niebla, lo que obligo a retrasar obligatoriamente el despegue de la segunda oleada. El resultado de este imprevisto, fue que la Luftwaffe repostada y rearmada les estaban esperando, 21 fortalezas volantes, fueron derribadas antes de que una bomba fuera arrojada sobre las fabricas. El 16% de los aviones que despegaron no regrasaron, ademas de un centenar con daños de naturaleza varia. En cambio la Luftwaffe sufrio 25 derribos, pero a diferencia, los pilotos alemanes saltaban en paracidas en propio territorio.
El segundo momento cumbre de la ofensiva americana de bombardero diurno, se presento cuando aquel dia 14 se despego con 291 B17 para acbar el trabajo. Esta vez, la reaccion de la caza alemana, fue sin precendentes en su magnitud, en la inteligencia con que habia sido planeada, y en la eficacia con que se habia ejecutado, segun propias palabras de los americanos. En total entraron en accion 300 cazas monomotores, 40 bimotores y algunos nocturnos. Lo mas aterrador de todo esto era que la fuerza original compuesta por 291 bombarderos, 198 se habian perdido o inutilizado. Este fue el peor desatre acaecido a una formacion de bombardero en toda la historia de la aviacion belica y los americanos sencillamanete se vieron imposiblitados de proseguir su ofensiva. El fuego defensivo de los B17 habia causado la destruccion de solo 38 cazas, y desperfectos en 20 mas.

[beltzo]

Hola a Todos:

Los norteamericanos cometieron un grave error en el frente aéreo que pagaron muy caro. Pensaron que sus cuatrimotores fuertemente armados podrían defenderse por si solos y bombardear de día suelo alemán sin escolta de caza. Los ingleses ya les habían advertido del error (por algo ellos se dedicaban al bombardeo nocturno) pero aún así los norteamericanos solo aprendieron con sangre.

En Julio de 1943 la Luftwaffe calculó que había infligido pérdidas a los norteamericanos del orden del 12 al 15% de los cuatrimotores empleados. Los datos norteamericanos de la VIII Flota Aérea indicaban que ese mes en 5 acciones sobre suelo alemán habían perdido 87 de un total de 838 aparatos disponibles, estos datos suponen más de un 10%. Estos no incluyen los aparatos averiados que no podían usarse en siguientes acciones por lo que el cálculo de los alemanes era bastante certero.

Con estos datos una gran flota aérea de bombardeo, al cabo de 10 misiones dejaba literalmente de existir y no digamos la posibilidad de supervivencia de las tripulaciones que quedaba estadísticamente reducida a la nada puesto que la frontera de supervivencia para las tripulaciones norteamericanas era del 4%, ya que su ciclo era de 25 misiones. Las tripulaciones norteamericanas llamaron a este periodo el "verano sangriento" y acabó con todo su optimismo e incluso tuvo graves perjuicios en su moral. De haberse mantenido, estas pérdidas hubiesen sido inasumibles incluso para los norteamericanos.

Este el contexto en que se desarrollan las dos misiones contra Schweinfurt, la primera en agosto y la segunda en octubre.

Saludos

[Calígula]

El jefe de la Fuerzas Aereas del Ejercito de los USA, el general Arnold, llego a dar credito oficial al punto de vista de que ya no volveria a ser necesario bombardear Schweinfurt, de tan completa como habian quedado destruidas las fabricas. Exagerando el efecto estrategico producido por el bombardeo. Esto en el mejor de los casos eran simples anhelos y, a pesar de los graves problemas que supuso para ellos el ataque, los alemanes encontraron la forma de resolver la crisis de su rodamientos. En realidad, ya con mucha anticipacion, habian dedicado muchas horas a pensar en el problema. Speer nombro ahora a Kessler como comisionado especial de la industria de rodamientos. Las investigaciones probaron que los stocks eran mayores de lo que esperaba, y ademas, el ingenio encontro medios adecuados para reducir el numero de rodamientos necesarios y el numero de tipos a fabricarse. Se hicieron acuerdos con Suecia que hacian posible el aumento de la importacion de aquellos tipos necesitados urgentemente. La produccion futura se planeo y se realizo de forma relativamente dispersa. Por estos y otros procedimientos, el equipo de speer, y muy especialmente Kessler, lograron nuetralizar los efectos del 14 de Octubre