Premio Nobel, ex Waffen-SS

[Eckart]

Justo dos años depués de la polémica, no puedo resistir la tentación de transcribir aquí un párrafo del Yo no de Joachim Fest -sus memorias sobre el periodo nazi- en el que viene a dejar un explícito recado a Günter Grass y otros muchos:

La adaptación durante los primeros años de la posguerra se ha calificado posteriormente como “silencio elocuente”, lo cual no suponía simplemente una forma de represión. Más bien en él se mezclaban el desencanto, la vergüenza y el despecho, en un conjunto impregnado de rechazo de la culpa. Hay que añadir la tendencia a interpretar papeles protagonistas. Unos se inventaron actos de resistencia que nunca realizaron, en el juego del arrepentimiento, se esforzaban por buscar un sitio bien visible en el banco de la autoacusación. Sin embargo, en medio de sus lamentos parecían dispuestos a calumniar a quienes no hicieran como ellos y se dieran continuamente golpes en su pecho pecador. Cuando Günter Grass o alguno de los innumerables autoacusadores manifestaban su sentimiento de vergüenza, en modo alguno querían llamar la atención sobre su propia culpabilidad, más bien sobre los muchos motivos de todos los demás para avergonzarse. No obstante, según ellos, para su escándalo y el de todos los demás, la gran masa no estaba preparada para esto. Ellos se sentían ya libres de cualquier reproche gracias al reconocimiento de su vergüenza.

FEST, Joachim. Yo no. Taurus/Santillana Ediciones Generales S.L. Madrid: 2007. p. 275.

Ahí queda.

[30januar]

Sirvio Gunter Grass en la 10a. división Panzer ss "Jorg Von Frundsberg".
Pues el no le pone como mucho orgullo a la cosa,y su fugaz paso por la división lo considera como
solamente estar en la mili .(No fué voluntario ,ni estuvo en una escuela del partido o algo semejante).
La historia completa la pueden leer en su libro "pelando la cebola"
es un libro del 2006 de caracteristicas autobiográficas.
les dejo el siguiente link ,donde comentan varias experiencias en la division.
http://www.elmundo.es/papel/2006/08/15/uve/2011922.html

[Antonio Machado]

Hola estimados foristas:

Muy interesante el tema objeto de discusión en este Hilo, con muchas ramificaciones e implicaciones éticas y morales.

Tiendo a estar de acuerdo con los distinguidos foristas que han expresado su opinión favorable a este gran escritor ganador del Premio Nobel de Literatura.

Sorprenden conceptos como el expresado por Michael Juergs (biógrafo de Grass) en el artículo de "El Clarín" quien "reconoció sentirse "desilusionado". "Es el fin de Grass como instancia moral", sentenció." Para nada estoy de acuerdo.

Discrepo igualmente de lo expresado por el historiador Michael Wolffsohn: "La confesión, luego de un largo silencio, le resta valor a su obra moral". Hmmm..... no lo creo. Confesar un error refleja grandeza de espíritu, no estrechez moral ni mezquindad. Al otro no le restó valor moral para ser Papa...

Mi modesto criterio está más de acuerdo con lo expresado por Klaus Staeck, Director de la Academia de Artes de Berlín, quien señaló: "No sacar las conclusiones del error cometido habría sido un error. En cambio, Grass sacó las conclusiones ya mucho tiempo atrás".

Inclusive el gran filósofo Martin Heidegger continuó defendiendo la filosofía Nazi hasta su muerte. Acaso ello resta valor académico o entereza moral a sus obras...?



Mucho más apropiado me parece el criterio expresado por distinguidos foristas como Eckart:

De hecho, el haber estado enrolado en las Waffen-SS (alistado obligatoriamente, según afirma él) no le sorbió el cerebro y fue capaz de desarrollar una personalidad propia y libre de los prejuicios y fobias nazis. Y con creces que lo ha demostrado. Un saludo.

O los pensamientos de Jesús Hernández:

La verdad es que hace falta valor para tomar la decisión de confesar eso a esas alturas de su vida, con casi 80 años. Vale que ahora saca su autobiografia y que le vendrá muy bien la publicidad, pero aún así creo que hay que aplaudir su decisión, aunque sea con varias décadas de retraso.

¿Hubiera sido mejor que nos hubiéramos enterado de esta impostura tras su muerte?

Saludos cordiales desde Nueva York,

Antonio Machado.