La Segunda Guerra Mundial mató más europeos que cualquier otra guerra de su historia, pero no fue sólo la muerte la única consecuencia trágica de la contienda.
Millones de personas se vieron desplazadas de sus hogares , destruidas sus creencias y lacerada su moral.
Un oficial británico comentaba que en Alemania veía sólo mujeres, ancianos y niños, estando ausentes los hombres de entre 16 y 48 años.
Grupos étnicos enteros fueron desplazados , bombardeados, masacrados , destruidos o expulsados de sus hogares, o huyeron de los mismos, perdiendo su lugar en el mundo.
Millones de mujeres soviéticas quedaron condenadas a la soltería no elegida, dado que su pares varones habían perecido en la contienda.
Millones de niños se vieron desplazados, perdieron a sus familias en bombardeos, quedaron huérfanos de padre, o de madre o de ambos progenitores, y las reacciones de estos niños y de la sociedad en la que vivían fue muy diversa.
Algunos pequeños tuvieron suerte y fueron adoptados por familiares o por extraños que se compadecieron de ellos .
Otros vivían en bandas semisalvajes que robaban, mendigaban y se prostituían para sobrevivir.
Debemos recordar que muchos de estos menores habían sido criados en sistemas totalitarios de verdades absolutas y odios absolutos, por lo cual la pérdida de toda fe se acentuó terriblemente :los habían preparado para un mundo que, sencillamente ,ya no existía, kaputt. Si bien tanto los niños alemanes ( en las juventudes Hitlerianas y en la escuela) como los soviéticos habían sido adoctrinados , esto últimos , al salir vencedores en la guerra , mantenían intacto y ratificado su sistema de creencias. Muy diferente era el caso de los jóvenes alemanes, : hasta mayo de 1945 eran miembros de una raza superior y al día siguiente un pueblo de vencidos. Pero, a medida que se fueron descubriendo los peores frutos del nazismo (campos de exterminio, masacres étnicas, etc. ), estos jóvenes se sintieron parte de un pueblo homicida, despreciado, culpable...
Bandas de niños semi salvajes vagabundeaban por la Europa de posguerra, y sobrevivían como podían :sea robando, mendigando, prostituyéndose , siempre sin una idea de futuro: tratando e sobrevivir día a día.
En Roma solamente existían 180.000 niños vagabundos, y el Papa pidió ayuda para ellos ,dado el alto nivel de riesgo físico y moral que sufrían.
Se supone que hubo un millón de huérfanos de guerra polacos y más de un millón en Alemania , pero las estadísticas se revelaban sólo en las zonas ocupadas por los Aliados occidentales.
Estos niños malvivían en las calles, muchos de ellos "vendedores " de los jefes del mercado negro. Otros estaban protegidos por la Cruz Roja, vivían en ex-campos de prisioneros. Estos pequeños se dedicaron a esperar la reaparición de sus padres hasta muy avanzados los años 50. Hubo muchos que lograron su sueño, ya que en el año 1955 el Canciller Adhenauer logró pactar con la URSS para la repatriación de muchos ex-combatientes alemanes tomados prisioneros por los soviéticos.
El cineasta Roman Polanski (judío y polaco que logró sobrevivir al ghetto de Varsovia) se reencontró con su padre (sobreviviente de un campo de concentración ) en lo que llamó "el día más feliz de mi vida".
Organizaciones judías trataron de recuperar a los huérfanos judíos, ubicándolos en hogares adoptivos o en orfelinatos en Israel y otros países.
Hubo diferentes reacciones individuales frente a las penurias. Una niña alemana relató al oficial británico William
Byford- Jones que ella dormía feliz en una grieta del monumento al Kaiser Willhelm porque era: "Abrigado y seguro, nadie podía subir. No pueden encontrarme ", tal fue su descripción de su "hogar ".Y probablemente tenía mucha razón y así se había salvado de morir de frío, de ser violada, etc. El Servicio Alemán de Bienestar Social tardó en convencerla de abandonar su refugio...
En los cines se proyectaba- antes del film- imágenes y datos de niños perdidos, esperando que alguna persona los reconociera y hablara con sus padres, si es que estos estaban con vida. Esta costumbre comenzó durante los finales del Tercer Reich y se volvió a poner en práctica en las zonas ocupadas por los aliados occidentales.
Lo mismo que listados de personas perdidas, en estaciones de trenes, carteles callejeros, etc.
Los niños soviéticos huérfanos de guerra solían ser adoptados por familiares, o por extraños. Si nada de esto sucedía, eran llevados a orfelinatos, adonde el nivel de adoctrinamiento era muy fuerte: se suponía que quien reemplazaba a los perdidos padre y madre era la figura omnipresente e infalible del "Padrecito Stalin".
Otros niños sufrieron por partida doble: fueron aquellos que por sus rasgos arios les fueron quitados a sus familias de origen e incorporados a familias alemanas por organizaciones nazis, con el objetivo de ser "germanizados". Como sus padres adoptivos les habían dado muy bien trato, sufrieron al ser sacados de sus familias de origen y sufrieron al ser devueltos a sus familiares legítimos.
El nivel de prostitución infantil alcanzó niveles altísimos. Se veía con malos ojos (por ejemplo) a las tropas francesas coloniales que compraban niños de seis o siete años, pero estaba difundido y tolerado el comprar niñas de entre trece y diecisiete años, ya que se decía que no eran mucho menores que los jóvenes soldados aliados.
Keith Lowe cita a un polaco y sus experiencias de posguerra :
Andrezj dice: "Eramos como perros salvajes. La vida era muy interesante, el miedo había desaparecido, lucía el sol y había cosas fascinantes por descubrir ".
Andrezj narra como él y sus amigos jugaban con armas , por ejemplo un obús que hicieron estallar ... y hasta con un panzerfaust, y muchos otros juegos peligrosos. Sólo temía que lo descubriera su madre y pusiera coto a sus andanzas.
(Existe una película francesa muy interesante sobre este mismo tema )
Andrezj finaliza su relato diciendo :"Eramos estúpidos y afortunados. Si no tienes cerebro, tienes que tener suerte... "
Y suerte tuvo, porque no perdió a su madre y poco después reapareció el padre. Esto le evitó caer en la categoría de "huérfano de guerra", que se aplicaba a todo menor de edad que hubiese perdido a uno o ambos progenitores en la contienda.
Los estudios psicológicos sobre los huérfanos de guerra muestran que estos padecen autoestima baja, tendencia a la depresión, propensión a la ansiedad, al abuso de substancias, tendencias suicidas, conductas erráticas y antisociales ...
Si padre y madre simbolizaron desde antaño la ley y el alimento,el hogar , la pérdida de uno a ambos era un desastre y , siendo tantos los afectados, sociedades enteras padecieron estos trastornos, que cambiaron su moral, su confianza en el futuro y su sentido de pertenencia.
Se podría hablar de una contracara, dado que se registró una cierta euforia en los países que resultaron ganadores en la contienda (sobre todo los que no habían sido invadidos , por ejemplo USA), y en una mejora en la esperanza y fe en la vida a partir de la mejoría económica experimentada desde que se instrumentó el plan Marshall, a principios de los años 50.
Fuentes :
-"Continente Salvaje ", de Keith Lowe. De éste se extrajo la mayor parte del material.
-"Se desataron todos los infiernos ", de Max Hastings.
-"París después de la liberación", de Anthony Beevor y Artemis Cooper.
-"Alemania 1945", Richard Bessel.
-"La piel", Curzio Malaparte (novela ).
- El reportaje a Roman Polanski fue realizado a mediados de los años 60, por la televisión española.Ignoro el nombre del entrevistador.
Millones de personas se vieron desplazadas de sus hogares , destruidas sus creencias y lacerada su moral.
Un oficial británico comentaba que en Alemania veía sólo mujeres, ancianos y niños, estando ausentes los hombres de entre 16 y 48 años.
Grupos étnicos enteros fueron desplazados , bombardeados, masacrados , destruidos o expulsados de sus hogares, o huyeron de los mismos, perdiendo su lugar en el mundo.
Millones de mujeres soviéticas quedaron condenadas a la soltería no elegida, dado que su pares varones habían perecido en la contienda.
Millones de niños se vieron desplazados, perdieron a sus familias en bombardeos, quedaron huérfanos de padre, o de madre o de ambos progenitores, y las reacciones de estos niños y de la sociedad en la que vivían fue muy diversa.
Algunos pequeños tuvieron suerte y fueron adoptados por familiares o por extraños que se compadecieron de ellos .
Otros vivían en bandas semisalvajes que robaban, mendigaban y se prostituían para sobrevivir.
Debemos recordar que muchos de estos menores habían sido criados en sistemas totalitarios de verdades absolutas y odios absolutos, por lo cual la pérdida de toda fe se acentuó terriblemente :los habían preparado para un mundo que, sencillamente ,ya no existía, kaputt. Si bien tanto los niños alemanes ( en las juventudes Hitlerianas y en la escuela) como los soviéticos habían sido adoctrinados , esto últimos , al salir vencedores en la guerra , mantenían intacto y ratificado su sistema de creencias. Muy diferente era el caso de los jóvenes alemanes, : hasta mayo de 1945 eran miembros de una raza superior y al día siguiente un pueblo de vencidos. Pero, a medida que se fueron descubriendo los peores frutos del nazismo (campos de exterminio, masacres étnicas, etc. ), estos jóvenes se sintieron parte de un pueblo homicida, despreciado, culpable...
Bandas de niños semi salvajes vagabundeaban por la Europa de posguerra, y sobrevivían como podían :sea robando, mendigando, prostituyéndose , siempre sin una idea de futuro: tratando e sobrevivir día a día.
En Roma solamente existían 180.000 niños vagabundos, y el Papa pidió ayuda para ellos ,dado el alto nivel de riesgo físico y moral que sufrían.
Se supone que hubo un millón de huérfanos de guerra polacos y más de un millón en Alemania , pero las estadísticas se revelaban sólo en las zonas ocupadas por los Aliados occidentales.
Estos niños malvivían en las calles, muchos de ellos "vendedores " de los jefes del mercado negro. Otros estaban protegidos por la Cruz Roja, vivían en ex-campos de prisioneros. Estos pequeños se dedicaron a esperar la reaparición de sus padres hasta muy avanzados los años 50. Hubo muchos que lograron su sueño, ya que en el año 1955 el Canciller Adhenauer logró pactar con la URSS para la repatriación de muchos ex-combatientes alemanes tomados prisioneros por los soviéticos.
El cineasta Roman Polanski (judío y polaco que logró sobrevivir al ghetto de Varsovia) se reencontró con su padre (sobreviviente de un campo de concentración ) en lo que llamó "el día más feliz de mi vida".
Organizaciones judías trataron de recuperar a los huérfanos judíos, ubicándolos en hogares adoptivos o en orfelinatos en Israel y otros países.
Hubo diferentes reacciones individuales frente a las penurias. Una niña alemana relató al oficial británico William
Byford- Jones que ella dormía feliz en una grieta del monumento al Kaiser Willhelm porque era: "Abrigado y seguro, nadie podía subir. No pueden encontrarme ", tal fue su descripción de su "hogar ".Y probablemente tenía mucha razón y así se había salvado de morir de frío, de ser violada, etc. El Servicio Alemán de Bienestar Social tardó en convencerla de abandonar su refugio...
En los cines se proyectaba- antes del film- imágenes y datos de niños perdidos, esperando que alguna persona los reconociera y hablara con sus padres, si es que estos estaban con vida. Esta costumbre comenzó durante los finales del Tercer Reich y se volvió a poner en práctica en las zonas ocupadas por los aliados occidentales.
Lo mismo que listados de personas perdidas, en estaciones de trenes, carteles callejeros, etc.
Los niños soviéticos huérfanos de guerra solían ser adoptados por familiares, o por extraños. Si nada de esto sucedía, eran llevados a orfelinatos, adonde el nivel de adoctrinamiento era muy fuerte: se suponía que quien reemplazaba a los perdidos padre y madre era la figura omnipresente e infalible del "Padrecito Stalin".
Otros niños sufrieron por partida doble: fueron aquellos que por sus rasgos arios les fueron quitados a sus familias de origen e incorporados a familias alemanas por organizaciones nazis, con el objetivo de ser "germanizados". Como sus padres adoptivos les habían dado muy bien trato, sufrieron al ser sacados de sus familias de origen y sufrieron al ser devueltos a sus familiares legítimos.
El nivel de prostitución infantil alcanzó niveles altísimos. Se veía con malos ojos (por ejemplo) a las tropas francesas coloniales que compraban niños de seis o siete años, pero estaba difundido y tolerado el comprar niñas de entre trece y diecisiete años, ya que se decía que no eran mucho menores que los jóvenes soldados aliados.
Keith Lowe cita a un polaco y sus experiencias de posguerra :
Andrezj dice: "Eramos como perros salvajes. La vida era muy interesante, el miedo había desaparecido, lucía el sol y había cosas fascinantes por descubrir ".
Andrezj narra como él y sus amigos jugaban con armas , por ejemplo un obús que hicieron estallar ... y hasta con un panzerfaust, y muchos otros juegos peligrosos. Sólo temía que lo descubriera su madre y pusiera coto a sus andanzas.
(Existe una película francesa muy interesante sobre este mismo tema )
Andrezj finaliza su relato diciendo :"Eramos estúpidos y afortunados. Si no tienes cerebro, tienes que tener suerte... "
Y suerte tuvo, porque no perdió a su madre y poco después reapareció el padre. Esto le evitó caer en la categoría de "huérfano de guerra", que se aplicaba a todo menor de edad que hubiese perdido a uno o ambos progenitores en la contienda.
Los estudios psicológicos sobre los huérfanos de guerra muestran que estos padecen autoestima baja, tendencia a la depresión, propensión a la ansiedad, al abuso de substancias, tendencias suicidas, conductas erráticas y antisociales ...
Si padre y madre simbolizaron desde antaño la ley y el alimento,el hogar , la pérdida de uno a ambos era un desastre y , siendo tantos los afectados, sociedades enteras padecieron estos trastornos, que cambiaron su moral, su confianza en el futuro y su sentido de pertenencia.
Se podría hablar de una contracara, dado que se registró una cierta euforia en los países que resultaron ganadores en la contienda (sobre todo los que no habían sido invadidos , por ejemplo USA), y en una mejora en la esperanza y fe en la vida a partir de la mejoría económica experimentada desde que se instrumentó el plan Marshall, a principios de los años 50.
Fuentes :
-"Continente Salvaje ", de Keith Lowe. De éste se extrajo la mayor parte del material.
-"Se desataron todos los infiernos ", de Max Hastings.
-"París después de la liberación", de Anthony Beevor y Artemis Cooper.
-"Alemania 1945", Richard Bessel.
-"La piel", Curzio Malaparte (novela ).
- El reportaje a Roman Polanski fue realizado a mediados de los años 60, por la televisión española.Ignoro el nombre del entrevistador.