La resistencia italiana
Publicado: Mar May 22, 2012 10:48 pm
Las mujeres italianas en la resistencia
Aproximadamente, una cuarta parte de los colaboradores en la Resistencia italiana durante la Segunda Guerra Mundial eran mujeres. Su valentía, coraje y sacrificio allanó el terreno para su implicación y reconocimiento como iguales en el futuro económico y político de Italia.
En 1943, la Resistencia se fortaleció en Italia, ya que muchos hombres eligieron unirse a ella antes que ceder ante la política alemana que obligaba a los militares italianos a incorporarse al conflicto, junto al ejército alemán o, en caso contrario, ser detenidos en una redada y encarcelados por no unirse. Las mujeres también se unieron a los partisanos pero su implicación en la Resistencia era verdaderamente un acto voluntario ya que ellas no se enfrentaban a las mismas consecuencias que los hombres si decidían no participar en la guerra.
Las mujeres partisanas llevaron a cabo misiones extremadamente peligrosas para la Resistencia. Ellas transmitían mensajes entre los grupos de partisanos y también desde y hacia la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS) y los Grupos Operativos (OGs), entregaban comida, dinero, ropa y a veces incluso armas a los grupos de la Resistencia. Con frecuencia, estas partisanas tenían que cruzar las líneas alemanas para cumplir con sus misiones. En cada una de esas ocasiones corrían el riesgo de ser descubiertas, siendo conscientes, en todo momento de que podían terminar torturadas hasta la muerte. Aún así, siguieron valerosamente con sus cometidos, a veces sufriendo penurias para llevar a cabo sus misiones.
Además de tomar parte en la actividad partisana, las mujeres también se ofrecieron voluntarias para trabajar en los Grupos de Defensa de la Mujer y de Ayuda a los Luchadores por la Libertad (gruppi di difesa della donna e per l’asistenza ai combatenti della liberta) o GDD. Los GDD reunían comida, dinero y ropa, que lavaban y arreglaban. Se trataba de actividades en las que participaban mujeres alrededor de todo el mundo en ese momento para ayudar a sus compatriotas masculinos; la diferencia en Italia era que si se descubría a estas mujeres ayudando a los partisanos aunque solo fuera de esta manera, serían arrestadas y a veces torturadas o asesinadas. Las mujeres de los GDD también desempeñaban un papel fundamental en la motivación de otras mujeres hacia el activismo público y las reclutaban para que colaboraran en diversos cometidos de la Resistencia.
Tras la guerra, 200.000 italianos fueron registrados oficialmente como miembros activos de la Resistencia, de los cuales 55.000 eran mujeres. A partir del mes de abril de 1945, las mujeres italianas comenzaron a participar en la política de su país en un número sin precedentes. El cincuenta por ciento de las mujeres elegidas en el Parlamento de la postguerra tenían antecedentes partisanos. Los logros que consiguieron las mujeres italianas a través de su valeroso trabajo con la resistencia consistieron en la adquisición de un sitio en la mesa de la política italiana que hoy en día conservan.
Fuente: http://www.ossinitaly.org/Women/womenin ... tance.html
Aproximadamente, una cuarta parte de los colaboradores en la Resistencia italiana durante la Segunda Guerra Mundial eran mujeres. Su valentía, coraje y sacrificio allanó el terreno para su implicación y reconocimiento como iguales en el futuro económico y político de Italia.
En 1943, la Resistencia se fortaleció en Italia, ya que muchos hombres eligieron unirse a ella antes que ceder ante la política alemana que obligaba a los militares italianos a incorporarse al conflicto, junto al ejército alemán o, en caso contrario, ser detenidos en una redada y encarcelados por no unirse. Las mujeres también se unieron a los partisanos pero su implicación en la Resistencia era verdaderamente un acto voluntario ya que ellas no se enfrentaban a las mismas consecuencias que los hombres si decidían no participar en la guerra.
Las mujeres partisanas llevaron a cabo misiones extremadamente peligrosas para la Resistencia. Ellas transmitían mensajes entre los grupos de partisanos y también desde y hacia la Oficina de Servicios Estratégicos (OSS) y los Grupos Operativos (OGs), entregaban comida, dinero, ropa y a veces incluso armas a los grupos de la Resistencia. Con frecuencia, estas partisanas tenían que cruzar las líneas alemanas para cumplir con sus misiones. En cada una de esas ocasiones corrían el riesgo de ser descubiertas, siendo conscientes, en todo momento de que podían terminar torturadas hasta la muerte. Aún así, siguieron valerosamente con sus cometidos, a veces sufriendo penurias para llevar a cabo sus misiones.
Además de tomar parte en la actividad partisana, las mujeres también se ofrecieron voluntarias para trabajar en los Grupos de Defensa de la Mujer y de Ayuda a los Luchadores por la Libertad (gruppi di difesa della donna e per l’asistenza ai combatenti della liberta) o GDD. Los GDD reunían comida, dinero y ropa, que lavaban y arreglaban. Se trataba de actividades en las que participaban mujeres alrededor de todo el mundo en ese momento para ayudar a sus compatriotas masculinos; la diferencia en Italia era que si se descubría a estas mujeres ayudando a los partisanos aunque solo fuera de esta manera, serían arrestadas y a veces torturadas o asesinadas. Las mujeres de los GDD también desempeñaban un papel fundamental en la motivación de otras mujeres hacia el activismo público y las reclutaban para que colaboraran en diversos cometidos de la Resistencia.
Tras la guerra, 200.000 italianos fueron registrados oficialmente como miembros activos de la Resistencia, de los cuales 55.000 eran mujeres. A partir del mes de abril de 1945, las mujeres italianas comenzaron a participar en la política de su país en un número sin precedentes. El cincuenta por ciento de las mujeres elegidas en el Parlamento de la postguerra tenían antecedentes partisanos. Los logros que consiguieron las mujeres italianas a través de su valeroso trabajo con la resistencia consistieron en la adquisición de un sitio en la mesa de la política italiana que hoy en día conservan.
Fuente: http://www.ossinitaly.org/Women/womenin ... tance.html