El Sexto Ejército de Hollidt en el Mius

La guerra en el este de Europa

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Chuikov
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El Sexto Ejército de Hollidt en el Mius

Mensaje por Chuikov » Sab Sep 05, 2009 4:57 pm

El último asalto a la colina 213.9

A las 11:15 la “Totenkopf” recibió órdenes sobre cuándo lanzar su ataque. Fueron informados de que la 213.9 sería tomada por la tarde, una vez los ataques en el sector de la “Das Reich” crearan una situación favorable.

Haciendo uso del poco tiempo que tuvieron, los mecánicos de la división trabajaron para rescatar varios vehículos. El día 1 de Agosto la división informó de que disponía de: 3 Tigers, 11 Pz IV, 5 Pz III y 6 tanques de comando, un total del 25. Se contaba asímismo con 4 cañones de asalto y 16 cañones antitanque autopropulsados de 7,5 cm montados en chasis ligeros.

En cuanto a personal, los batallones habían sido reducidos a fuerzas de unos 80-100 hombres. Para el 1 de Agosto, del regimiento “Totenkopf” sólo quedaba el nombre, contando apenas con el personal equivalente a un batallón. Por eso fue reforzado por el II./”Eicke”, comandado por el Sturmbannführer Kurt Launer, y por elementos de los batallones SS de pioneros y de reconocimiento.

A las 13:00, previa preparación artillera y de bombardeos de Stukas, el veterano del regimiento “Totenkopf” SS Rottenführer Hax recordaba lo que decían los comandantes: “Preparaos para el movimiento. Las cosas están marchando rápido.”

Hasta entonces los pioneros habían estado trabajando duramente, al abrigo del maíz y los girasoles, para dejar una pista libre de minas para los tanques. Las reservas de la división eran casi inexistentes: la única formación que se dejó detrás fue el batallón 3 del SS Panzer Aufklärung, y algunas compañías del Batallón 3 de ingenieros.

En lugar de tanques, a la cabeza del avance irían cañones antitanques motorizados de 7,5 cm, del batallón de PanzerJäger. A las 13:30 los destacamentos de asalto comenzaron el ataque y los restos del regimiento “Totenkopf” se lanzaron de nuevo hacia las posiciones enemigas.

Los tanques comenzaron a avanzar. Delante de los tanques una delgada línea de granaderos avanzaba detrás de los cañones de asalto. Pronto se vieron bajo fuego enemigo. Los alemanes esperaban avanzar bajo la protección de su artillería hasta que estuvieran lo suficientemente cerca de las fortificaciones rusas. Los tanques no entrarían en accción hasta que los granaderos no eliminaran las posiciones antitanque.

Avanzando por entre el fuego de amaetralladoras rusas, los granaderos continuaban monte arriba mientras los vehículos del Aufklärung eliminaban nidos de resistencia.

Una vez cerca de la primera línea rusa, se precipitaron al ataque, irrumpiendo en varios puntos, redeando los puntos fuertes y continuando hacia arriba. Hasta que se encontraron con una cortina de fuego y explosiones erigida por morteros y artillería. En este punto se vieron obligados a buscar refugio.

Cuando el ataque flaqueaba los Nebelwerfer comenzaron a disparar. Entre el polvo las tropas volvían a la carga. Bajo el liderazgo personal del Obersturmbannführer Otto Baum y del Sturmbannführer Karl Ullrich las tropas renovaron el asalto a las posiciones rusas, eliminando bunkers y posiciones antitanque. Diversas tandas de Stukas continuaron bombardeando la colina y, combinadas con la artillería de buena parte de las baterías del 6º ejército, dirigieron su fuego sobre las posiciones artilleras rusas en las colina 191.3, 194.3 y 140.3. Los progresos de las otras divisiones en el frente se notaban, ya que la intensidad de la artillería rusa era mucho menor que la de los días anteriores. Y como consecuencia de esto, el ataque alemán comenzó a progresar. Ahora el enemigo no era un tormento invisible disparando desde posiciones camufladas, casi agujeros invisibles y bunkers. La artillería alemana cada vez con más frecuencia y puntería apoyaba el avance.

A las 14:30, “Totenkopf” informó de que su asalto había quebrado la linea defensiva principal de la colina. A las 15:30, en el flanco derecho, el batallón de Pioneros informó de progresos al oeste de la colina, mientras que el batallón de reconocimiento avanzaba por el ala izquierda al noroeste de la colina 213.9.

Las concentraciones artilleras eran constantemente ajustadas y se coordinaban nuevos planes para machacar los puntos fuertes rusos. En este tipo de apoyo flexible, la artillería alemana siempre fue superior a la rusa. La artillería alemana podía proporcionar fuego para el ataque principal suprimiendo el fuego enemigo de flanco, pero era lo suficientemente flexible como para redireccionar sus baterías para apoyar a las tropas que acometían el asalto a la 213.9 o a otros emplazamientos. Las baterías de Nebelwerfer también resultaron muy útiles, por su alta capacidad explosiva y por el humo.

Un ejemplo de la habilidad alemana para resituar su fuego de apoyo es el uso de baterías Nebelwerfer para apoyar el asalto de Stadler a la colina 203.4 por la mañana y reagrupar luego la misma batería para apoyar, por la tarde, el asalto a la colina 213.9.

Bajo la sacudida de un total de unos 600 cañones alemanes, la artillería rusa se debilitó más, aunque el fuego de mortero aún era muy peligroso. Con gran parte del fuego de flanco ruso eliminado, el ataque sobre la loma central ganó ímpetu después de que los tanques y los Stukas se unieran al ataque.

Todavía el fuego antitanque era bastante peligroso, especialmente el dirigido a los flancos de los tanques SS, proveniente de un área al sureste de Stepanovka. Los Nebelwerfer trataron de arreglar el asunto lanzando una barrera de proyectiles de humo. De esta forma los tanques y cañones de asalto renovaron su progreso.

Al regimiento Panzer reportó a los cuarteles de la división que sus tanques estaban en la parte central de la colina a las 16:00. En este punto, cuando los tanques aún se encontraban liquidando los últimos reductos, los rusos se reunieron y contraatacaron contra los granaderos de la cara este. Se podían ver varios batallones colina arriba, dirigiéndose hacia los granaderos SS. Ahora era el momento de las metralletas alemanas, que dispararon con la ventaja de la altura. En ese momento, cuando el asalto alemán parecía estar detenido, se recibió ayuda de la Luftwaffe, que bombardeó la zona de contraataque ruso y dio varias pasadas ametrallando el terreno, lo que hizo detener el contraataque.

A las 16:35 la división reportó que el lado oeste de la colina estaba seguro y el lado este estaba en proceso. Si bien había algunos focos de resistencia aislados aún en la colina, ya posición ya estaba practicamente en manos alemanas.

La amarga lucha por la colina 213.9 había acabado después de 3 días de combates sangrientos. A las 17:00, en un mensaje dirigido al cuartel del II SS PanzerKorps, “Totenkopf” informó de que “La colina 213.9 había sido tomada, a pesar de un fuerte fuego antitanque”.

La retirada rusa comenzó.
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Mensaje por Chuikov » Sab Sep 05, 2009 5:26 pm

Después de la pérdida de la colina 213.9 y del fallo del contraataque, los rusos probaron a construir una posición de bloqueo al otro lado de la colina. Se formó una línea de defensa de forma precipitada, alrededor de diversos emplazamientos antitanque. El comando soviético lanzó entonces desesperadamente un ataque a la ladera sureste, comprometiendo para ello a una división de rifles para tratar de parar el avance entre la colina 213.9 y la 194.3, al este de la crretera Marinovka-Ssneshnoje.

Otros elementos de la infantería rusa avanzaron más al este de la nueva línea, contraatacando el flanco izquierdo del regimiento “Eicke”. El ataque ruso dio en el seno del regimiento, en el valle de Gerassimova, y estuvo acompañado por artillería de Dmitrievka y por algunos aviones.

“Das Reich” y la 23 Div Panzer se se dirigieron hacia la colina 194.3, ya entrada la tarde, ampliando así sus penetraciones. Este movimiento amenazó el flanco izquierdo de la nueva posición de bloqueo adoptada por los rusos al sureste de la colina 213.9. Así pues, éstos tenían dos opciones: o recapturar la 213.9 o retirarse sin paliativos.

Las posiciones de los dos enemigos ahora estaban justo al revés.

Ese mismo día, pero más tarde, las divisiones continuaron su avance hacia el río. Un batallón de tanques de la “Das Reich” alcanzó la colina 168.5 a las 22:15 h. Mientras tanto, algunos elementos de la “Das Reich” y de “Totenkopf” montaron una posición segura para la noche alrededor de la 194.3, y con vistas a continuar el ataque al día siguiente.

La batalla estaba ganada por los alemanes, pero lo que éstos no sabían era que Tolbukhin había cosechado un rotundo éxito en su misión, que no era otra que mantener tropas alemanas ocupadas en el sur para favorecer el desarrollo de la batalla en Kursk y las subsecuentes (Kharkov-Belgorod).

Sin los ataques diversionarios en Izyum y en el Mius, seguramente el 1º Ejército de Tanques y el 5º Ejército de Guardas de Tanques rusos hubieran sido destruidos por las divisiones de Hoth en los días siguientes al 12 de Julio o, al menos, hubieran encontrado aún más dificultades.
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Mensaje por Chuikov » Sab Sep 05, 2009 5:33 pm

La batalla en el Mius se puede ver como un ejemplo de la guerra en Rusia pero a pequeña escala. Las fuerzas alemanas, casi siempre superiores a las rusas, comparándolas división a división, aunque siempre sobrepasadas en número, obtuvieron una victoria táctica. Sin embargo la estratégica se la llevaron los rusos, que consiguieron su principal objetivo: La retirada de Panzers de Kursk y Kharkov.

A las 22:00 la “Totenkopf” reportó que había recibido ataques, y que todavía se encontraban envueltos en combate con los rusos. A las 22:50 el ataque ruso terminó de difuminarse.

Finalmente los alemanes expulsaron a los rusos de la cabeza de puente del Mius. Sin embargo no se consiguió cercar a gran cantidad de tropas rusas, por lo complicado del terrano y por lo cercenadas que se encontraban las tropas alemanas.


Visto en perspectiva, el hecho de que Tolbukhin perdiera o no en el Mius es elgo irrelevante. La victoria estratégica es la que contaba.

Saludos.
Carpe Diem

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