Foro Segunda Guerra Mundial

Unas 8.000 cartas de admiradoras del führer fueron encontradas al término de la II Guerra Mundial. Si el contenido de los mensajes se consideraba exagerado, se enviaba a las autoras a un manicomio.

Algunas de ellas contenían declaraciones afectivas que consagraban a Hitler como un mito erótico para las feminas alemanas.

"Queridísimo 'führer', quiero tener un hijo tuyo"

"Querídísimo Adolf, soy una mujer de Sajonia que desea tener un hijo suyo"

Algunas de las cartas establecen sutiles paralelismos entre el sexo y la guerra: "Quiero abrir mi ‘frente' para que usted pase y sienta cuánto le quiero".

Una nota encontrada por el soldado norteamericano Enker junto a las 8.000 cartas muestra una orden de ingreso de una admiradora en una clínica de salud mental. El documento contiene una copia del fragmento que escribió la mujer por el que caería en desgracia: "Si no puedo estar al lado del III Reich soy un cadáver viviente"

Fuente: http://www.adn.es/mundo/20080417/NWS-26 ... -fans.html

Difícil de esta situación es única. Sin embargo, por un lado, esto está relacionado con Hitler y, por otro, con su sobrina, que no era su seguidora. Sí, lo siento por la chica y su
relación con el Fuhrer fue interesante. Me gustó mucho una buena publicación, estuve buscando esta información durante mucho tiempo.

Yo diría que Hitler sufría un trastorno narcisista o psicopático de la personalidad agudo y que era incapaz de sentir auténtico amor hacia otras personas, yo entiendo que amar implica capacidad para la empatía y la compasión, cualidades de las que entiendo Hitler carecía en gran medida.

Por otro lado, también es cierto que Hitler era capaz de ser afectuoso, incluso muy afectuoso, con sus correligionarios, admiradores, amigos y amantes, pero en tanto estos se alineasen con sus deseos, con su egoísmo. Es bien sabido que en las distancias cortas, con su círculo interno de relaciones, sabía ser encantador con gran eficacia, cosa que por otro lado es también característico de las personalidades narcisistas/psicopáticas.

Me parece significativa por ejemplo de la personalidad hitleriana su relación con su perra fiel y obediente, Blondi. ¿Llegó realmente Hitler a amar a Blondi, eso era realmente amor? Salvando las distancias podría compararse a su relación con Alemania y con los que le acompañaron en el bunker los últimos días, ¿no?