Mensaje
por José Luis » Dom Nov 06, 2011 11:30 am
¡Hola a todos!
Si el atentado de Elser hubiera tenido éxito, matando a Hitler, la "pregunta" realizada por fermat de cómo juzgaría la historia a Hitler tendrá una respuesta que, en mi opinión, dependerá de cómo habría acabado esa historia y de a quién o a quiénes se le hiciera la pregunta.
En 1939, antes del atentado de Elser, ya había juicios sobre Hitler, su régimen y el nazismo entre muchos alemanes, dentro y fuera de Alemania. No voy a descubrir nada si digo que para la gente del NSDAP Hitler era una especie de dios que había obrado milagros para Alemania como la eliminación del paro, la revisión de las fronteras, Versalles y bla, bla, bla. Y para la inmensa mayoría del cuerpo de oficiales de la Wehrmacht era el genio que había recuperado, además de lo anterior, el honor del ejército alemán y, sobre todo, su inusitada expansión y "modernización", con cantidad de ascensos de por medio. Y lo mismo podían opinar otros colectivos, como el de la industria pesada, el universitario, etc., o confesiones como las cristianas católica y protestante, o, en suma, una opinión que compartiría una parte mayoritaria de la sociedad alemana de 1939.
En la otra cara de la moneda estaba la otra parte de la sociedad alemana, cuantitativamente muy inferior pero cualitativamente muy importante, compuesta principalmente por los críticos y las víctimas del nazismo, los más exiliados en el extranjero (decenas de miles) y los menos sufriendo en silencio en Alemania. Obviamente, ya no estaban los que habían sido asesinados por el terror nazi por el camino. Para estos, Hitler no era una especie de dios, sino de demonio.
Y luego estaban las opiniones o juicios de quienes no eran alemanes, el resto del mundo. Y en 1939, antes del atentado de Elser, había para todos los gustos, con mayor o menor conocimiento de causa. En el terreno del liderazgo político, la divergencia de esas opiniones, y los intereses tras las mismas, habían llevado a la guerra y la continuarían. Pero aquí llegamos a un punto crucial, a mi juicio.
Si Hitler hubiera muerto víctima del atentado de Elser en noviembre del 39 es muy probable que la continuación de la guerra por parte de Alemania hubiera tomado un rumbo diferente, en el terreno militar, al que siguió en la realidad de la historia. Formalmente, Göring habría sucedido a Hitler como canciller y jefe del Estado, y no veo ningún obstáculo a dicha sucesión, toda vez que cumplía con los deseos expresos de Hitler. Pero Göring, como nuevo comandante supremo de la Wehrmacht, carecía del genial olfato táctico y de la voluntad de Hitler, y, por tal motivo, dudo mucho que fuera siquiera la sombra de lo que Hitler fue como conductor de la Wehrmacht y de la guerra. Muy probablemente se avendría a tomar la posición estratégica que dominaba las mentes de los Brauchitsch, Halder, Reichenau, Leeb, Witzleben, Rundstedt, etc. Estos caballeros preferían llegar a toda costa a un entendimiento con sus enemigos (Francia y Gran Bretaña) y un final político a la guerra que continuar con una aventura para la que no sentían del todo preparados. Imaginar un desenlace así está lleno de especulaciones y variables difíciles, si no imposibles, de ponderar. Por otra parte, si decidían continuar la guerra, ninguna evidencia histórica apoya, sino todo lo contrario, que los planes elaborados por Erich von Manstein, a falta de Hitler, fuesen aceptados por el Alto Mando del Ejército, con lo que no habría finalmente el famoso "Corte de Hoz" de mayo de 1940. O quizás sí, si pensamos que Brauchitsch y Halder ya no tendrían la presión de Hitler de atacar inmediatamente, ni su intimidación que les hacía literalmente temblar; quizás, con más tranquilidad y sosiego, darían más atención a la otrora incómoda impertinencia de Manstein, apoyada por su jefe Rundstedt. Sea como fuere el plan final de la campaña militar contra F&GB, es bastante probable que la Wehrmacht triunfase igualmente, pues los graves defectos en el mando y control de las fuerzas anglo-francesas, a todos los niveles, sería una constante con o sin "Corte de Hoz" que acabarían inclinando la balanza a favor de los alemanes. Pero a partir de aquí, es prácticamente ciencia-ficción imaginar cómo discurriría la guerra. Y sin saber cómo acabaría la guerra, y con ello la historia alemana en la misma, es imposible saber qué opinarían los alemanes de Hitler que no fuera otra opinión de la que ya tenían en 1939, antes de la aventura de Elser. Sin los singulares crímenes del régimen nazi -los "crímenes contra la humanidad"- la visión histórica de un Hitler muerto en noviembre de 1939 estaría muy supeditada al resultado final de la guerra y a sus consecuencias para Alemania.
Los crímenes de estado del régimen nazi hasta noviembre de 1939 estarían ahí, inamovibles. Pero no serían interpretados de igual forma por el pueblo de una Alemania nazi perdurable tras la guerra que por el de una Alemania nazi acabada por la guerra. Vamos, que a fin de cuentas tampoco pensarían lo mismo que piensan hoy, con algunas nostálgicas excepciones, de un Hitler perdedor de la IIGM que de uno triunfante en la misma, por muy difícil que sea imaginar este último escenario.
Saludos cordiales
JL
"Dioses, no me juzguéis como un dios
sino como un hombre
a quien ha destrozado el mar" (Plegaria fenicia)