Si yo no creo nada. La fe la dejo para la iglesia. Aunque la historia no sea una ciencia exacta, mediante los documentos uno puede hacerse una idea aproximada. Yo no tengo acceso a la Biblioteca del Congreso ni a archivos nipones, pero investigadores independientes prestigiosos sí lo tienen, y todos llegan a al misma conclusión: que Roosevelt esperaba ser atacado, pero no en Hawai, y que lo de Pearl fue una sorpresa buscada por los japoneses y conseguida gracias a errores norteamericanos. Mientras que las “teorías conspiratorias” no pasan de ser artículos de periodistas o “best sellers” mal informados, con interpretaciones parciales y suposiciones arriesgadas.Erwin Rommel escribió:O bien de creerse la propaganda proamericana, no? O solo vemos la paja en el ojo ajeno
Un ejemplo de los “argumentos” de los “historiadores” de las teorías conspiratorias y que hasta ahora no han “investigado”. Si Pearl Harbor hubiese dispuesto de radares no habría sorpresa. Estaba prevista su instalación… para el mes siguiente. Un primer equipo sólo funcionaba a ratos, y con personal inexperto ¿Quién retrasó la entrega de los equipos? ¿Quién puso a esos incompetentes ahí? Se deja en el aire, y el lector obtiene una conclusión.
Pero si uno es objetivo, tiene que reconocer que los equipos de radar eran una novedad absoluta, que salían de las fábricas con cuentagotas, que la electrónica de la época era muy poco fiable y no permitía un funcionamiento continuado, y que muchos mandos desconfiaban de esos cachivaches. Que sus dotaciones eran inexpertas, pues al fin y al cabo eran aparatos nuevos y proclives a las falsas alarmas. Y los jerifaltes no confiaban demasiado en ellos.
Como este hay muchísimos otros argumentos que no se sostienen. Como ese que a Pearl no se habían enviado aviones de reconocimiento. Basta con leer la disponibilidad de PBY Catalina, B-18 Bolo y otros aviones de reconocimiento (sólo había 115 aviones de tipos aptos para el reconocimiento; no todos estaban disponibles, pero la base estaba muy lejos de estar ciega).
Pero no se trata de datos sino de creencias. Y puestos a creer, yo creo que el antiamericanismo visceral hace ver a los yanquis como la mano negra detrás de toidas las desgracias de la historia. Incluyendo la derrota del Eje, que algunso parecen lamentar. No miro a nadie, quien quiera darse por aludido, allá él.
Y volviendo al tema, coincido con José Luis. Las elucubraciones deben ser razonables, basarse en los hechos y en la personalidad de los actores. Todo lo demás puede ser muy divertido, pero no serio.
Saludos