Los políticos del Reichswehr

Acontecimientos políticos, económicos y militares relevantes entre noviembre de 1918 y septiembre de 1939

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Mensaje por José Luis » Vie Sep 29, 2006 1:25 am

¡Hola a todos!

Bueno, Werto, he consultado el libro de Kolb para lo de los resultados de las elecciones a la Asamblea Naconal celebradas el 19 de enero de 1919, y como utiliza la fuente oficial (que detallaré al final), los podemos dar como definitivos. Además, esclareceremos las diferencias que teníamos con los escaños conseguidos por el SPD.

Estaban capacitados para votar 36.766.000 ciudadanos, de los que lo hicieron 30.524.000 (83%). Número total de escaños: 421 (423)*. Resultados:

• DNVP: 3.121.000 votos (10.3%), 44 escaños

Wirtschaftspartei/Bayer Bauernbund: 275.000 votos (0.9%), 4 escaños

Deutsch-Hannoversche Partei: 77.000 votos (0.2%), 1 escaño

• DVP: 1.345.000 votos (4.4%), 19 escaños

Zentrum (en 1919: Christliche Volkspartei): 5.980.000 votos (19.7%), 91 escaños

• DDP : 5.641.000 votos (18.5%), 75 escaños

• SPD : 11.509.000 votos (37.9%) 163 (165)** escaños

• USPD : 2.317.000 votos (7.6%), 22 escaños

• Otros : 131.000 votos (0.5%), 2 escaños

Fuente : Statistichen Johrbach für das Deutsche Reich, vol. 52 (Berlin, 1933), p. 539

*El número total de escaños variaba de un parlamento a otro, pues dependía del número de votos realizados.

**Los dos miembros adicionales del SPD fueron elegidos por el Ejército Oriental el 2 de febrero de 1919, llevando el total a 423 escaños, y la fuerza del SPD a 165 escaños.

Eberhard Kolb, The Weimar Republic (Routledge, 1990), página 194.

Saludos cordiales
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Última edición por José Luis el Dom Oct 01, 2006 1:53 am, editado 1 vez en total.
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Werto
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Mensaje por Werto » Vie Sep 29, 2006 4:04 am

Hola a todos.

Pues genial José Luis, porqué he estado cotejando los datos y ninguna de las dos fuentes que habíamos citado anteriormente coinciden con los resultados oficiales.

Saludos.
Jonny coge el Bombardero,
y lo eleva por el cielo,
no hay cañón que alcance a Jonny,
ni rival que lo derribe...

Jonny no mata a la gente.
elimina el objetivo,
Jonny no es un asesino;
Jonny es frio..., y profesional.

Tal vez no veamaos en el ESTAIR, Supendereis.

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Mensaje por José Luis » Vie Sep 29, 2006 5:00 am

Pues yo no veo tanta diferencia en los datos facilitados por mi fuente anterior:

-concedía al DNVP 44 escaños, y así fue.
-concedía al SPD 163 escaños, y así fue si no contamos los 2 escaños de las elecciones del 2 de febrero.
-concedía al Zentrum 91 escaños, y así fue
-erró en los votos separados del DDP (75 en vez de 78) y DVP (22 en vez de 19), pero acierta en la totalidad (97). El fallo se debe probablemente a una cuenta confusa, dado que recién se acababan de dividir los nacionales liberales.
-En los votos del USPD el fallo lo cometí yo, pues me engañé.

Y tampoco veo grandes diferencias en los datos de tu fuente:

-Dio 165 escaños al SPD, y así fue si contamos las elecciones del 2 de febrero.
-22 escaños al USPD, y así fue
-91 al Zentrum, y así fue
-19 al DVO (sic) [DVP], y así fue
-44 al DNVP, y así fue
-el fallo está únicamente en los escaños dados al DDP (75 en vez de 78, curiosamente igual fallo que en mi fuente)
-Y bueno, da 5 escaños al resto, cuando fueron 7

Así que a grandes rasgos no hay diferencias sustanciales, si dejamos a un lado las precisiones de rigor (no obstante siempre importantes, según qué).

Saludos cordiales
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Mensaje por José Luis » Sab Sep 30, 2006 6:22 pm

¡Buenos días a todos!

La historia ha sido un poco injusta con el general Walther Reinhardt, pues apenas le ha dedicado la atención que realmente se merece. Sin embargo, fue el último ministro de guerra Prusiano (enero a febrero de 1919) y el primer Chef der Heeresleitung del Reichswehr (octubre de 1919 a marzo de 1920). Sin duda, hay que agradecer a William Mulligan (1) sus esfuerzos por recuperar la memoria y el significado de esta importante figura militar de la historia inicial de la RdW.

Este württemburgués de origen (nació en Stuttgart en 1872) era hijo de Emile y Karl Heinrich August von Reinhardt, quien había luchado en las guerras de unificación alemana, siendo más tarde ascendido al estado mayor general de la recién creada 27ª (2º Royal Württemberg) División de Ulm. El abuelo paterno fue administrador municipal, y el materno era profesor de silvicultura en la universidad de Tübingen. Walther ingresó en 1885 en la escuela de cadetes de Oranienstein, y, tras completar su educación militar, entró como Portepée-Fähnrich (oficial cadete) en el prestigioso Regimiento Olga de Württemberg en 1891. En la Gran Guerra sirvió como oficial del EMG. Su casamiento en 1900 con con Luise Fürbringer (de quien tuvo tres hijas), hija del afamado profesor del hospital Friedrichshain de Berlín, Paul Fürbringer, de origen judío, le granjeó entre los oficiales del ejército fama de filo-semita.

El 3 de noviembre de 1918, Reinhardt fue nombrado jefe del Departamento de Desmovilización del Ministerio de Guerra Prusiano, donde, dada la coyuntura del momento, tuvo que enfrentarse a una tarea realmente complicada. Cuando llegó a Berlín cinco días más tarde, venía impresionado por el caos reinante que había observado detrás de las líneas del frente durante su viaje, aunque lo que más le asombró fue contemplar a los oficiales del ejército vestidos a la usanza civil. Cuando más tarde se enteró de la abdicación del emperador, este monárquico convencido rompió a llorar como un niño, según él mismo comentó a los miembros del Gobierno Provisional. Una de sus primeras tareas fue precisamente garantizar la seguridad del gabinete del GP en torno a la Wilhelmstrasse, y a tal efecto fue nombrado jefe de la Ordnungsdienst, una unidad armada.

Quizás la personalidad de Reinhardt y su posicionamiento político final se demostraron auténticamente en sus actitudes durante el “proceso de negociación” (2) del Tratado de Versalles en el verano de 1919, primero, y durante el Putsch de Kapp en marzo de 1920, después. Se opuso frontal e infructuosamente a la firma del TdV, pero supo, sin embargo, aceptar estoicamente la irreversible realidad del momento y, a diferencia de otros altos militares, trabajó de lleno para afianzar la RdW. Durante el golpe de estado de Kapp, ya como Chef der Heeresleitung y de acuerdo con Gustav Noske, entonces ministro de Defensa (3), ordenó al Reichswehr defender al gobierno de la república. Sin embargo, sus órdenes fueron realmente desafiadas por su segundo, el Chef des Allgemeinen Truppenamts (comúnmente, Truppenamt, que vino a ser la tapadera del antiguo y ahora prohibido EMG), el general Hans von Seeckt, quien ordenó la estricta neutralidad del Reichswehr. La orden de Seeckt era un poco cínica, pues eran oficiales del Reichswehr quienes estaban atentando contra el orden legal establecido, pero de esta cuestión hablaremos en otra ocasión.

Viéndose desautorizado por su subordinado, Reinhardt dimitiría tras la neutralización del golpe de Kapp. Tras su renuncia a la jefatura del Heeresleitung, Reinhardt asumió el mando del V Wehrkreis de Stuttgart, y ejerció los poderes plenipotenciarios que le confirió el estado de emergencia de 1923 para enviar a sus unidades a Turingia y sofocar la coalición revolucionaria del KPD-SPD. Murió en 1930, tras participar, desde su retiro en 1927, en importantes debates nacionales sobre política militar.

Aunque este topic versa sobre el papel político jugado por los altos mandos del Reichswehr, no está de más rematar este post sobre Reinhardt con algunos de sus logros. Aunque sentó las bases para la organización del ejército alemán de posguerra, finalmente fracasó en su objetivo de hacerlo completamente dependiente del poder civil. Los clásicos privilegios del emperador en política militar durante su Kaiserreich, que tienen su expresión práctica en el Kommandogewalt (4), tenían que acabar, pensaba Reinhardt, en la nueva RdW. Pero el Reichswehr, durante ese periodo, siempre fue una especie de estado dentro del estado.

Sin embargo, fue Reinhardt quien dirigió la supresión de los consejos de soldados, quien estableció las regulaciones de servicio dentro del Reichswehr, quien centralizó los ministerios militares de los estados individuales (5), y quien levantó las estructuras del Reichswehrministerium. Por ello hay quien lo considera como el verdadero creador del Reichswehr, siendo von Seeckt el artífice de su diseño y entrenamiento. Mulligan dice, con toda razón (6), que el conocimiento de Reinhardt no figuró “en el panteón público de los famosos generales”. Cuando en febrero de 1934 el recién nombrado Chef der Heeresleitung, general Werner von Fritsch, recordó a sus predecesores el general Kurt von Hammerstein-Equord, Wilhelm Heye y Hans von Seeckt, todos ellos muy familiares para el público alemán, declaró: “Hay un nombre perdido, el de un hombre excepcional que estaba allí al principio, cuyo trabajo el público no conoce en demasía, pero cuyo imperecedero servicio siempre permanecerá, el fundador del ejército alemán de posguerra: Walter Reinhardt.”

Hermann Metz, quien acompañó a la Comisión Parlamentaria para el Ejército de Tiempos de Paz (Vorkommission für das Friedensheer), que elaboró las regulaciones para el servicio del Reichswehr, escribió después de la Segunda Guerra Mundial: “Le tocó entonces al Ministro de Guerra, general Reinhardt, establecer las bases para el nuevo ejército. Él es el creador del ejército, no el general von Seeckt, como cree la gente ahora. El último fue su diseñador y entrenador. Los libros de Rabenau sobre Seeckt han influido demasiado en la historiografía de este periodo. Se le concede muy poca atención a Reinhardt. Reinhardt no fue muy querido por Seeckt, Groener o Lossberg, pero tenía un gran prestigio dentro del cuerpo de oficiales.”

(1)William Mulligan, The Creation of the Modern German Army: General Walther Reinhardt and the Weimar Republic, 1914-1930 (Berghahn Books, 2005). Me he servido de este libro para la biografía de Reinhardt y para las citas de Fritsch y Metz.

(2)Realmente no hubo un proceso de negociación, sino una imposición de condiciones por parte de los aliados, que los alemanes no tenían más remedio que aceptar finalmente.

(3)El ministerio de guerra durante esa etapa puede causar no pocas confusiones. El último ministro de guerra prusiano de 1918 fue Heinrich Scheüch, que cesó el 9 de noviembre. Luego, hasta el 2 de enero de 1919 no hubo ministro de guerra prusiano. En ese día fue nombrado Reinhardt (a pesar de que Ebert quería a Noske para el puesto, según Goerlitz), quien lo desempeñó hasta el 13 de febrero de 1919. A partir de esa fecha el nuevo ministerio sería denominado Ministerio de Defensa de Alemania, siendo su primer jefe Gustav Noske.

(4)El Kommandogewalt era una estructura clave en la vida política y constitucional del Kaiserreich; venía a significar que el Kaiser ejercía el Kommandogewalt sin restricción alguna del Reichstag; éste sólo tenía una influencia indirecta en la política militar, pues controlaba los presupuestos militares. El ministro de guerra prusiano iba al Reichstag a explicar la política militar y a responder preguntas, dando pues una cuenta pública de la misma. Pero poco podía hacer el Reichstag en última instancia, pues caso de no aprobar los presupuestos del gobierno, podía ser disuelto, y luego una mayoría progubernamental podía volver tras nuevas elecciones y votar los presupuestos anteriormente rechazados.

(5) El II Reich alemán estaba formado (aparte de unos veintitantos estados y ciudades libres) por los ejércitos de los reinos de Prusia, Bavaria, Sajonia y Württemberg, cada uno de ellos teniendo su propio Ministerio de Guerra.

(6)Con toda razón, pues es sumamente difícil encontrar bibliografía sobre Reinhardt.

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Mensaje por Eckart » Dom Oct 01, 2006 12:01 am

¡Hola, amigos!

Permitidme que vuelva a tocar el tema del resultado de las elecciones de enero de 1919 que habéis estado contrastando anteriormente. He advertido que los números de la fuente que cita José Luis (Kolb) dan una suma superior al total de escaños reales, sin contar las elecciones de febrero. Así, la suma de los escaños conseguidos por todos los partidos según esta fuente, alcanza los 424, cuando hubo 421 (423 tras febrero). Esos tres escaños que sobran coinciden con la diferencia entre los 75 ó 78 escaños que se ha estado barajando que obtuviera el DDP. El número de escaños del DVP quedaría en 19.

Hay una muy buena página web donde se pueden consultar datos muy precisos y completos de esas elecciones y de todas las demás que hubo en Alemania entre 1919 y 1933, aunque tal vez ya la conozcáis:
www.gonschior.de/weimar/Deutschland/NV.html

Un saludo.
«El conocimiento es mejor que la ignorancia; la historia es mejor que el mito».
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Mensaje por José Luis » Dom Oct 01, 2006 1:52 am

Gracias, Eckart. He repasado la lista de Kolb y la culpa no es de él, sino mía. He puesto 78 escaños al DDP, y Kolb tiene puestos 75. Seguramente me debí hacer un lío con el baile de cifras y lo puse mal. Repito, error mío al transcribir. Ahora mismo voy a editar ese fallo.

Gracias y saludos
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Mensaje por José Luis » Dom Oct 01, 2006 1:55 am

Rectificado.
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Mensaje por José Luis » Dom Oct 01, 2006 8:21 pm

¡Hola a todos!

El hombre que consiguió hacer del Reichswehr el ejército de elite mejor preparado del mundo en las décadas de 1920 y 1930 tenía un semblante tal que bien podría haber sido utilizado para ilustrar las postales de Navidad como Papá Noel. Al menos esa es la impresión que me producen sus retratos de la época: cabello ralo y bigote blancos, rostro bonachón, y un monóculo al uso que no oculta, sin embargo, una mirada inteligente, reflexiva y enérgica. Los hombres que mandaba le habían puesto un sobrenombre: “La Esfinge”.

Hans von Seeckt fue, sin duda, el padre espiritual del Reichswehr y quien sentó las bases de la doctrina militar alemana. Su contribución, en este sentido, fue de tal naturaleza que es imposible hablar de los primeros éxitos de la Wehrmacht del Tercer Reich sin hablar del coronel general von Seeckt. Pero aquí nos interesa el von Seeckt político y su no disimulado anti-republicanismo, pues dos hechos quedan claramente reflejados en la actitud del Reichswehr durante su jefatura: siempre salió en defensa del gobierno de la RdW cuando el régimen se vio desafiado desde la izquierda; se mostró cínicamente neutral cuando los retos procedían de la derecha.

Así fue durante el llamado Putsch de Kapp, en el que un grupo de radicales bajo la dirección política de este Junker de Prusia del Este estableció un régimen autoritario en Berlín el 13 de marzo de 1920. Cuando el mes anterior el gobierno ordenó el desmantelamiento de los dos primeros Freikorps, la División de Acero de Bisschoff, que había conquistado Riga a los bolcheviques en mayo de 1919, y la 2ª Brigada de Marina del capitán Ehrhardt, sus comandantes apelaron al general Lüttwitz, comandante del I Grupo de Mando en Berlín, quien se dirigió enfurecido a la oficina de Ebert para exigir la revocación de esas órdenes, la dimisión del mismo Ebert como comandante supremo del Reichswehr, el cese inmediato de la política de disminución de tropas y la convocatoria de nuevas elecciones. Ebert rechazó las peticiones de Lüttwitz, y Noske, que estaba presente, le dijo al general que si no estaba dispuesto a obedecer las órdenes del gobierno tenía que dimitir. Pero Lüttwitz envió órdenes a Döberitz para que Ehrhardt comenzara el golpe contra la república marchando sobre Berlín (1).

Cuando Noske y Reinhardt ordenaron la intervención del Reichswehr para defender al gobierno, Seeckt se opuso alegando que “Truppe schiesst nich auf Truppe”, (algo así como que “la tropa no dispara contra la tropa”), y cuando fue presionado por Noske, le respondió preguntando si deseaba ver una batalla en la Puerta de Brandeburgo. Noske estuvo a punto de suicidarse (2). El gobierno, que había abandonado la capital (a excepción del vicecanciller Schiffer), primero en dirección a Dresde, y luego a Stuttgart, tuvo que convocar una huelga general que fue, finalmente, quien echó abajo la intentona de Kapp-Lüttwitz.

Poco más de tres años después, cuando se gestaba el Putsch de Hitler-Ludendorff, el canciller Stresemann le preguntó a von Seeckt cómo iba a reaccionar el Reichswehr. “La Esfinge” le respondió: “El Reichswehr me obedece a mí." Y cuando el ministro prusiano de Interior, Carl Severing, le preguntó cuál sería la posición si la división bávara marchaba sobre Berlín, Seeckt sólo respondió: “El Reichswehr no disparará sobre el Reichswehr.” (3). Lo curioso del comportamiento de Seeckt es que poco antes, en septiembre de 1923, había sido atacado por el periódico nazi Völkischer Beobachter como “enemigo de la idea Völkisch, lacayo de la RdW, y peón de los siniestros elementos judeo-masónicos.” (4). Su mujer, de soltera Jacobsohn, era judía

Hans von Seeckt buscó como pudo la dimisión del canciller Gustav Stresemann (por su política de buscar un entendimiento con Francia, que iba en contra de la de Seeckt de estrechar las relaciones con la Unión Soviética), y la elección de un gobierno de concentración nacional de derechas (durante ese año de 1923 los franceses habían ocupado el Ruhr, y la tensión política en Alemania amenazaba una dictadura o la guerra civil; en esas se las vio Stresemann). Seeckt incluso acarició la idea de presentarse a la presidencia de la RdW, pero la inesperada muerte del presidente Ebert desbarató sus planes.

La carrera de Seeckt al mando del Reichswehr duró desde el 15 de junio de 1920 (su nombramiento oficial, aunque de facto ya lo ejercía realmente desde abril) hasta el 8 de octubre de 1926, cesado entonces por el presidente de la RdW, Hindenburg. Dos razones oficiales explican el cese: la emisión de su orden sobre la regulación del duelo entre oficiales y la invitación al hijo del ex Kaiser para asistir a unas maniobras militares (hecho que derivó en una tormenta política). Tengo para mí que las verdaderas razones de su destitución, su política de aislamiento con el gobierno de la república, venían siendo trabajadas desde antiguo por la éminence grise del Reichswehr, Kurt von Schleicher, y por un presidente, comandante supremo del Reichswehr, que veía en Seeckt un serio obstáculo entre él y el ejército.

Se dedicó a la política, ocupando un escaño en el Reichstag durante 1930-32. Asesor del generalísimo Chiang Kai-shek de China en 1934-35 (fue después reemplazado por el general Alexander von Falkenhausen, que dirigió a sesenta asesores alemanes en China hasta 1938), murió en Berlín el 29 de diciembre de 1936.

(1) Gordon Alexander Craig, Germany, 1866-1945 (Oxford University Press, 1999) p. 430.

(2) Goerlitz, p. 221

(3) Jonathan Wright, p. 248

(4) Louis L. Snyder, Encyclopedia of the Third Reich Crown Quarto (Wordsworth Editions Limited, 1998), p. 319

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Mensaje por José Luis » Mar Oct 03, 2006 5:27 pm

¡Buenos días a todos!

Antes de rematar este topic hablando del general Schleicher quisiera realizar algunas aclaraciones que, tras releer todo lo escrito hasta ahora, considero necesarias para una mejor comprensión del tema.

La primera ley que creó el Reichswehr fue promulgada por la Asamblea Nacional Constituyente en Weimar el 6 de marzo de 1919, pero al ser una ley de carácter provisional (pues con ella se ordenaba un estudio para la estructuración de un nuevo ejército), también el término para definir ese ejército fue provisional. De ahí que, en propiedad, hay que referirse al Reichswehr de esa época como Reichswehr Provisional. Y esa denominación permaneció hasta el 23 de marzo de 1921, fecha oficial de la creación del Reichswehr mediante la Ley de Defensa promulgada en ese día.

El Reichswehr estaba compuesto por el Reichsheer (ejército) y por la Reichsmarine (marina). El comandante supremo del Reichswehr era nominalmente el Presidente de la República de Weimar, aunque la autoridad real recaía en el jefe del Ministerio de Defensa. Sin embargo, en la práctica. el verdadero comandante en jefe del Reichswehr era el Chef der Heeresleitung (Jefe del Mando del Ejército). Como el Tratado de Versalles abolió el antiguo Estado Mayor General alemán, se creó un nuevo término para designar esa antigua institución. Así, Führerstab venía a significar en realidad el antiguo jefe de EMG, y Führerstaboffizier al oficial del EMG. De estas forma, el Chef der Heeresleitung venía a ser el jefe del Führerstab.

Subordinadas al Chef der Heeresleitung estaban las cinco secciones más importantes del Reichsheer: el Truppenamt (que era el antiguo EMG encubierto); el Allgemeines Heeresamt (Departamento u Oficina General del Ejército); el Heerespersonalamt (Departamento u Oficina de Personal del Ejército); el Heeresverwaltungsamt (Departamento u Oficina de Administración del Ejército); y el Heeres-Waffenamt (Departamento u Oficina de Armamento).

De estas cinco secciones la más importante era el Truppenamt. Constaba de cuatro secciones: T-1 (que representaba realmente al antiguo departamento de Operaciones y Despliegue del EMG); T-2 (organización); T-3 (ejércitos extranjeros); y T-4 (entrenamiento).

Tácticamente, la fuerza del Reichsheer constaba de 7 divisiones de infantería y 3 de caballería, las primeras numeradas de 1 a 7, y las segundas de 1 a 3. Los comandantes de las divisiones de infantería eran al mismo tiempo comandantes territoriales, pues las áreas de sus divisiones correspondían a los distritos militares (Wehrkreise), que eran siete, numerados del I al VII, y cubrían todo el territorio del Reich. Cada una de las siete divisiones de infantería tenía el mismo número del Wehrkreis al que estaba adscrita; así por ejemplo, la 1ª División de Infantería correspondía al I Wehrkreis (Berlín), la 7ª DI al VII Wehrkreis (Munich).

Las siete divisiones de infantería estaban controladas por dos mandos de grupos (Gruppenkommandos): Gruppenkommando 1 (Berlín) controlaba las divisiones del norte y este de Alemania; Gruppenkommando 2 (Kassel) las divisiones del sur y oeste de Alemania. Los dos comandantes en jefe de estos Gruppenkommandos estaban directamente subordinados al Chef der Heeresleitung.

El primer Chef der Heeresleitung del Reichswehr Provisional fue el general Walther Reinhardt, y el segundo y último el general Hans von Seeckt, que fue luego el primer Chef der Heeresleitung del Reichswehr. A Seeckt lo reemplazó el general Heye, a éste el general Hammerstein-Equord, y a Equord el general Werner von Fritsch.

Ebert (1919-1925) y Hindenburg (1925-1934) -primero y último presidentes de la RdW (Hitler abolió el título de Presidente y se nombró Führer und Reichskanzler, tras la muertede Hindenburg el 2 de agosto de 1934)- fueron los dos comandantes supremos nominales que tuvo el Reichswehr.

La RdW tuvo cinco ministros de defensa hasta la llegada de Hitler al poder en 1933: Gustav Noske (1919-1920), Otto Gessler (1920-1928), Wilhelm Groener (1928-1932), Kurt von Schleicher (1932), Ferdinand von Bredow (como suplente de Schleicher en 1932-1933), y Werner von Blomberg (de 1933 a 1935, año en que el ministerio pasó a llamarse de Guerra, con Werner von Blomberg como su jefe hasta su destitución por Hitler en 1938, quien tácitamente pasó a ocupar esa vacante hasta el final de la guerra). Obsérvese que exceptuando a Noske y Gessler, los demás ministros de defensa eran militares de profesión, aunque Groener se había retirado del ejército mucho antes de ocupar ese ministerio.

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Mensaje por José Luis » Jue Oct 05, 2006 12:59 am

¡Hola a todos!

La éminence grise del Reichswehr, Kurt von Schleicher, encontró su oportunidad para escalar los peldaños del poder cuando el Reichswehr Minister Otto Gessler se cansó de las arbitrariedades del Chef der Heeresleitung Hans von Seeckt. Hacía tiempo que Gessler se venía quejando a la Cancillería del desconocimiento en que lo mantenía von Seeckt con respecto a las actividades del Reichswehr, que legalmente estaba bajo su autoridad. Para acabar con esta frustración (el Reichstag había designado varias comisiones parlamentarias para averiguar las actividades del Heeresleitung, pero éstas se demostraron impotentes ante la maestría del ocultamiento de von Seeckt y su círculo), Gessler decidió crear una oficina dentro del Reichswehr completamente independiente del Heeresleitung, con la misión de informarle directamente de todo lo que sucedía alrededor de von Seeckt. Esa oficina se creó en 1926 bajo el nombre de Wehrmacht (no confundir con la denominación que recibieron las fuerzas armadas con Hitler; la Wehrmacht de Gessler venía a ser un departamento político dentro del Reichswehr), y Schleicher fue el encargado de dirigirla, convirtiéndose extraoficialmente en una especie de asesor y suplente del ministro de Defensa.

No hay duda alguna de que Schleicher intrigó para acelerar la caída final de von Seeckt, y también, como veremos, para la posterior de Otto Gessler. Con von Seeckt, Schleicher no tenía capacidad de acción (tanto para sus ambiciones personales como para encauzar la dirección del Reichswehr de acuerdo con su propia visión política), por lo que cuando estalló la tormenta política por la noticia de la invitación que von Seeckt cursó al hijo del ex emperador para unas maniobras (junto con su orden para el duelo entre oficiales), Schleicher aprovechó la ocasión para incrementar la presión sobre el presidente Hindenburg, especialmente a través de su hijo Oskar Hindenburg, con quien mantenía una estrecha relación desde la época en que ambos habían servido en un mismo regimiento. Cuando finalmente Hindenburg destituyó a von Seeckt, Schleicher se apresuró a apoyar al candidato que el mismo von Seeckt había recomendado al Presidente para sustituirlo: el general Heye. Resulta que Heye era un íntimo de Wilhelm Groener, y Schleicher era el protegido de Groener. En Heye, Schleicher encontró un hombre mucho más maleable y menos conservador que von Seeckt. Posteriormente, Schleicher no hablaría muy bien de von Seeckt, y hasta llegó a prohibir su asistencia a las maniobras militares.

A finales de 1927 hubo otro escándalo político, esta vez por los negocios del capitán Lohman por un uso inadecuado de los fondos secretos de la Reichsmarine. Esta situación afectaba directamente a Otto Gessler, y Schleicher no perdió tiempo para desacreditarlo, provocar su caída (Gessler había resistido al mando del Ministerio de Defensa un montón de crisis y varias cancillerías), y trabajar para el nombramiento de su antiguo protector Wilhelm Groener como nuevo ministro de Defensa, hecho que tuvo lugar en 1928. En ese año, recuerda Goerlitz, la República de Weimar vivía un hecho asombroso: tenía como presidente al antiguo jefe del EMG del ejército imperial, y como ministro de Defensa al que fue su último Generalquartiermeister. Con Groener como Reichswehr Minister, Schleicher se convirtió prácticamente en su secretario permanente.

En 1930 Schleicher volvería a jugar sus cartas. La mala salud del canciller Müller hizo que Groener tuviera que suplirlo en muchas ocasiones, tarea que sobrepasaba sus capacidades. En consecuencia, Groener delegó cada vez más en Schleicher, quien comenzó a asistir a las reuniones del gabinete y fue convirtiéndose en una especie de interlocutor entre los líderes del partido y el gobierno. La crisis política por la que entonces atravesaba el gobierno Müller, crisis económica y paro galopante derivados del crack de 1929, auguraba la caída de su gobierno. Nuevamente, Schleicher se había adelantado a los acontecimientos para reforzar su posición. En primer lugar, en 1929, sabiendo próximo el retiro del general Heye por causa de su edad, urdió el nombramiento del general Werner Blomberg, entonces jefe del Truppenamt, como comandante del Wehrkreis I. Blomberg, por escalafón, tendría que haber sido el nuevo Chef der Heeresleitung, pero Schleicher se aseguró de que Groener nombrara al general Hammerstein-Equord, un antiguo camarada de armas. En 1930 se realizó el cambio. El nuevo Chef der Heeresleitung fue llamado entre sus hombres el “general rojo”, por sus simpatías hacia la izquierda; sus dos hijas habían ingresado en el partido comunista.

En segundo lugar, Schleicher maquinó para que Brüning (del Zentrum) liderara un nuevo gabinete que debería gobernar al amparo del artículo 48 de la constitución de Weimar. Brüning había sido teniente en el frente en la última guerra, y había ganado la Cruz de Hierro de Primera Clase, hecho que lo situaba bien a los ojos del Reichswehr. Cuando el gobierno Müller se desintegró en marzo de 1930, Hindenburg encargó a Brüning la formación de un nuevo gobierno, que, tras no conseguir como era de esperar el apoyo del Reichstag, gobernó mediante decretos presidenciales y el apoyo del Reichswehr.

Fue bajo la cancillería de Brüning en 1930 cuando Schleicher se entrevistó con Hitler, quizás con el propósito de asegurarse el futuro si, contra todo pronóstico, el NSDAP durante esos tormentosos tiempos llegaba algún día al poder. Al acabar la entrevista, Schleicher salió convencido de que Hitler era un monomaníaco. No obstante, Hitler, especialmente a raíz del éxito electoral de septiembre de 1930, se había ganado la admiración de muchos militares (por ejemplo, Blomberg y su jefe de estado mayor, Reichenau, querían acercar el Reichswehr a las S.A.), y Schleicher tenía dudas. Pero cuando dos jóvenes oficiales del 5º Regimiento de Artillería de Ulm (que entonces mandaba el coronel Ludwig Beck) intentaron fundar células nacionalsocialistas, Hammerstein-Equord tomó cartas en el asunto ordenando el castigo y expulsión del ejército de esos dos oficiales. Ahora el Chef der Heeresleitung estaba totalmente enfrentado a los nazis.

En la primavera de 1931 Hitler tuvo otra entrevista significativa, esta vez con el antiguo jefe del Heeresleitung, Hans von Seeckt, quien a finales de 1929, tras la muerte de Gustav Stresemann (una tragedia para la RdW), había ingresado, ironías de la vida, en el partido del hombre a con quien tanto empeño había querido eliminar políticamente. Tras la entrevista, Seeckt declaró que el NSDAP debía ser considerado indudablemente un “elemento salvador”.

Por su parte, Hindenburg comprendió que si Hitler llegaba al poder, entonces las relaciones con Francia, Polonia y Checoslovaquia se complicarían en extremo. Determinó evitar que eso sucediera.

En el otoño de 1931 las calles de las grandes ciudades alemanas comenzaron a ser testigos de las luchas desastadas entre las S. A. y las milicias comunistas. Brüning, Hammerstein-Equord y Groener –sabiendo que la intervención de los comunistas era la reacción a las provocaciones de los S. A.- comenzaron a sopesar la posibilidad de suprimir por la fuerza a las milicias armadas del NSDAP. Aunque Hindenburg, en principio, se opuso, poco antes de las elecciones presidenciales de la primavera de 1932 fue convencido por Groener y Brüning, y las SA y SS fueron prohibidas. Entonces Schleicher volvió a ser el personaje clave en la caída del ministro de Defensa y del canciller. Él se oponía a la prohibición de las SA, pues quería utilizarlas, tras domesticar a los nazis, para reforzar al Reichswehr. Se puso de acuerdo con Hitler para derribar al gobierno Brüning, con el apoyo del presidente; a cambio Hitler pedía nuevas elecciones y la revocación de la prohibición de las SA. La primera víctima de esa conspiración fue el Reichswehr Minister Groener, quien, tras ser informado por Schleicher de que había perdido la confianza del Reichswehr, presentó su dimisión el 12 de mayo de 1932. Por su parte, Brüning cayó el 30 de mayo, tras perder completamente el favor de Hindenburg.

Mientras tanto, Schleicher estaba preparando a su próximo candidato, dándose buena prisa para presentárselo a Hindenburg. Se trataba de Franz von Papen, que había sido mayor en el EMG, y pertenecía al ala derecha del Zentrum. En el gabinete Papen, Schleicher fue nombrado ministro de Defensa. El primer paso importante de Papen fue deponer al gobierno prusiano (socialdemócrata) el 20 de julio, después de que Schleicher declarara previamente el estado de emergencia en el Wehrkreis III (general von Rundstedt). Tras el escrutinio de los votos de las elecciones generales que siguieron a continuación, el NSDAP se convirtió en el partido más importante del Reichstag, pero Hitler todavía no tenía la mayoría suficiente para formar gobierno; así que el 6 de agosto celebraría una reunión secreta con Schleicher para exponer su estrategia, y más tarde con Papen. Los acuerdos (fundamentalmente la cancillería de Hitler) establecidos en esas reuniones fueron radicalmente rechazados por Hindenburg, quien aseguró a Schleicher que su decisión era irrevocable, y a Papen de que sería el colmo que tuviese que hacer canciller del Reich al “cabo bohemio”.

En septiembre los comunistas presentaron una moción de censura (que prosperó) al gobierno Papen, con lo que se convocaron nuevas elecciones para primeros de octubre. Los resultados fueron negativos para los principales partidos, a excepción de los comunistas y el DNVP. Papen intentó en vano buscar apoyos para formar gobierno, y el 17 de noviembre dimitió con todo su gabinete. El 1 de diciembre Hindenburg encargaba a Schleicher la formación de un gabinete; Schleicher, entonces todavía ministro de Defensa, se convertía finalmente en canciller del Reich. Ahora la RdW tenía un canciller que se designaba a sí mismo como un “general social” y un Chef der Heeresleitung a quien llamaban el “general rojo”.

Pero entonces fue Papen quien conspiró contra Schleicher. Concertó una entrevista en la casa de Joachim von Ribbentrop entre Hitler y Oskar von Hindenburg, para que éste convenciese a su padre de crear una dictadura de Junkers. Schleicher no se estuvo quieto y se dirigió al presidente para conseguir su aprobación para un estado de emergencia. Por su parte, Hammerstein-Equord advirtió a Hitler de que si intentaba tomar el poder por la fuerza, entonces tendría que enfrentarse al Reichswehr. Al final triunfó la propuesta que Papen hizo a Hindenburg para crear un gabinete con Hitler como canciller, él mismo como vice-canciller y primer ministro prusiano, Neurath en Exterior, Blomberg como ministro de Defensa, Hugenberg en Comercio, Schwerin von Krosigk para Finanzas, y Gürtner para Justicia. Schleicher fue obligado a renunciar el 28 de enero, si bien continuó en el cargo hasta que fuese nombrado oficialmente el nuevo canciller. Sin embargo, Schleicher iba a jugar su última baza.

El 30 de enero el nuevo gabinete debía prestar su juramento ante Hindenburg, y con tal motivo Blomberg debía viajar desde su distrito militar a Berlín. Schleicher y Equord querían ganar a Blomberg para su causa y encargarle que comunicara a Hindenburg que el Reichswehr no reconocería al nuevo gobierno. A ese fin Schleicher envió a su ayudante, el capitán Noeldechen, a la estación del ferrocarril con órdenes para que Blomberg se dirigiera a reportar inmediatamente al Chef der Heeresleitung, Equord. Papen estaba entonces en la cancillería discutiendo con Hitler y Hugenberg la composición del nuevo gabinete. Según Düsterberg, que estaba presente (al igual que Göring), Papen trabajaba con la amenaza de que si no se formaba gobierno antes de las 11, Schleicher y Equord utilizarían al Reichswehr. Cuando Düsterberg preguntó a Papen dónde había obtenido esa información, éste le respondió que se la había filtrado Oskar Hindenburg. Después de hablar con Düsterberg, que había ido en su búsqueda, Oskar Hindenburg se dirigió a la estación del ferrocarril a esperar a Blomberg, así que cuando éste llegó a la estación vio que lo esperaban Oskar Hindenburg y el capitán Noeldechen.

Si Blomberg hubiese seguido el protocolo, que era acudir a la cita de su inmediato superior, Equord, quizás el destino de la RdW hubiera sido diferente. Pero el ladino general acudió a ver al presidente Hindenburg, y ese día, 30 de enero de 1933, a las 11.15 horas Hitler fue nombrado canciller. La carrera de Schleicher había terminado, aunque Hitler le tenía reservado un destino mucho más cruel.

La fuente de este último post ha sido casi exclusivamente Goerlitz, aunque he utilizado a Kershaw (vol. 1 de su Hitler) para las reuniones de Schleicher y Papen con Hitler.

Saludos cordiales
José Luis
"Dioses, no me juzguéis como un dios
sino como un hombre
a quien ha destrozado el mar" (Plegaria fenicia)

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