Bueno, pues sin más preambulos ahí va:
LA DIVISIÓN ACORAZADA DE LOS GUARDIAS BRITÁNICA, 1941-1945
INTRODUCCIÓN
Aunque organizadas y equipadas básicamente de la misma forma, y enfrentadas a tareas en general similares, haía diferencias notorias entre las tres divisiones acorazadas británicas que combatieron en el noroeste de Europa en 1944-45. La 7ª había evolucionado gradualmente desde los días anteriores a la guerra y había combatido ininterrumpidamente desde 1940, mientras que la de los Guardias y la 11ª Acorazada no se formaron hasta 1941 y pasaron casi tres años entrenándose en el Reino Unido antes de entrar en acción por primera vez en Normandía, a mediados de 1944. La 11ª Acorazada, al igual que la 7ª, estaba formada por una combinación de unidades de caballería, caballería del Ejército Territorial (Yeomanry) y RTR (Royal Tanks Regiments) en su brigada acorazada, y tenía batallonesde fusileros, de infantería ligera y de condado entre sus efectivos, mientras que la División Acorazada de los Guardias era sigular en cuanto a que prácticamente todas sus unidades, acorazadas y de infantería, tenían un orige común como batallones de guardias a pie dentro de la Brigada de los Guardias, antes de entrenarse como tripulaciones de carros de combate e infanetría en camiones o motorizada. Asimismo, posiblemente la Acorazada de los Guardias disfrutó de menos perturbaciones y más continuidad que las otras una vez entró en acción: a diferencia de la 7ª Acorazada, conservó los mismos comandanres de división y de brigadas a lo largo de todo el periodo de servicio activo, y a diferencia de la 11ª, conservó el mismo tipo de carro de combate, el Sherman, hasta el final de la guerra. Además, los refuerzos para sus dos brigadas procedían de las unidades de reclutamiento de los Guardias, aunque esto era una ventaja a medias, ya que la División Acorazada tuvo que competir con las demás formaciones de Guardias, en Italia y otros lugares, para conseguir los limitados recursos humanos disponibles.
Todos estos factores hicieron que cada división acorazada desarrollase sus propias características distintivas. Así, la Acorazada de los Guardias, lejos de tener un punto de vista conservador, como podría haberse esperado, fue más lejos que cualquiera de las otras dos divisiones en cuanto a integrar su fuerza acorazada y su infantería en unidades mixtas permanentes, y estuvo menos ingluida por los sistemas utilizados en campañas anteriores para el abastecimiento y apoyo de sus brigadas. Es con este telón de fondo como debemos considerar la organización y actividades de la división desde junio de 1944 hasta mayo de 1945; pero antes es necesario examinar brevemente su formación he historia antes a ese período.
La decisión de formar una División Acorazada de los Guardias se tomó, con aprobación del Rey, en la primavera de 1941, debido a la falta de tropas acorazadas en Inglaterra para hacer frente a una posible invasión alemana. Se formó en mayo, bajo el mando del general de división sir Oliver Leese. En septiembre, oficiales y otros rangos clave habían seguido cursos en Bovigtom y Lulworth, y la división se reunió por primera vez en el área de la llanura de Salisbury. En esta fase comprendía dos brigadas acorazadas, cada una con tres regimientos acorazados y un batalón de ingantería motorizada, y una agrupación de apoyo de artillería con un solo batallón de infantería en camiones.
El equipo era al principio escaso y anticuado. Aunque la necesidad de un buen mantenimiento y la capacidad para rectificar defectos, inculcadas gracias a las frecuentes averías de los maltrechos carros de combate Covenanter, pudieron haberle sido útiles a la división más adelante, ¡es dudoso que ello fuese apreciado entonces por las tripulaciones de carros de combate en dificultades! También tubieron que resolverse algunos problemas organizativos propios de los Guardias; así, el Bón. de Grenadier fue convertido en batallón motorizado cuando se reconoció la inonveniencia de tratar de apretujar a los guardias de la Compañía del Rey, de más de 1,82 m de altura, dentro de carros de cobate. En conjunto, los nuevos cometidos se abordaron con entusiasmo, y sólo unos pocos suboficiales y otros tuvieron que ser remplazados por tener una actitud demasiado tradicional para adaptarse.
En abril de 1942 el entrenamiento y equipo habían alcanzado el nivel que permitía ya hacer maniobras con la división al completo. A partir de entonces se organizaron ejercicios de escala y complejidad crecientes, hasta que la mayoría de formaciones del país intervinieron simultáneamente durante dos semanas en unas maniobras gigantescas, para entrenar en todas sus tareas a lo que entonces era el ejército para la invasión del Continente. La preparación fue tan cuidadosa, que los administrativos llegaron hasta el extremo de solicitar a las unidades que presentasen recomendaciones simuladas para la concesión de condecoraciones al valor. Las tácticas en las que se entrenó la división fueron en parte consecuencia de las lecciones aprendidas en el desierto, y en parte resultado de los ensayos y maniobras en Inglaterra, que se preveían más apropiadas para el equipo y tipo de terreno en el que combatirían.
A finales de 1942 tuvieron lugar varios cambios dentro de la división. Siguiendo el criterio general, una de las dos brigadas acorazadas fue sustituída por una brigada de infantería motorizada, y la agrupación de apoyo fue reorganizada como artillería divisionaria; al mismo tiempo, el regimiento de automóbiles blindados causó baja para convertirse en tropas de cuerpo de ejército y fue sustituido por un regimiento de reconocimiento acorazado con carros de combate. Así quedó, con pequeñas modificaciones posteriores, la organización para el resto de la guerra. Con los cambios de personal llegó también un nuevo comandante divisionario, el gral.div. A.H.S Adair, y los dos generales de brigada -N.H. Gwatkin, al mando de la 5ª Brigada Acorazada de los Guardias, y G.F. Johnson, de la 32ª Brigada de los Guardias- en los puestos que ocuparían a lo largo de toda la vida activa de la división.
A mediados de 1943, la división pasó a formar parte del VIII Cuerpo de Ejército, bajo el teniente general O'Connor, donde permaneció hasta después del desdembarco de Normandía. Luego de diversos cambios de equipamiento y ulterior entrenamiento en Norfolk y Yorkshire, la División Acorazada de los Guardias se reunió finalmente, como formación completamente equipada y altamente entrenada, no probada hasta entonces en combate, en el área de Brighton en junio de 1944.