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“Siguiendo ordenes del X Armee de Vietinghoff,el general Von Senger ordeno a Heidrich resistir con firmeza .El comandante de los paracaidistas acepto entusiasmado convencido de que defendía un reducto imposible de tomar. Heidrich creía ,y así lo explico mas tarde que
la posición de Cassino ,desde un punto de vista defensivo ,era tan perfecta que ningún ataque frontal podría lograr el éxito . Los paracaidistas cubiertos de polvo emergieron de los cascotes ,formaron,se pusieron firmes y después regresaron a sus agujeros y se prepararon para el inevitable asalto aliado. Los zapadores apuntalaron los debilitados techos de las bodegas alrededor del Hotel Continental .La transformación de Cassino en una ciudad comercial en un cruce a a una ciudad de resistir o morir,era completa.
A las 13.00 horas del miceroles, 350 tanques aliados esperaban en la sombra para desplegarse por Cassino ,mientras un único batallón de infantería neozelandes avanzaba lentamente hacia el sur caminando por la Via Caruso a lo largo del rió Rapido . Al introducirse en la ciudad presa del humo los fusileros encontraron un desconcertante y peligroso caos manzanas enteras reducidas a montones de piedra y ladrillos que se extienden por doquier .Cuando los exploradores pasaron junto a la destruida muralla de la cárcel de la ciudad el repiqueteo de disparos rompio el silencio .Las balas zumbaban por encima de sus cabezas y las toses de los tubos de mortero se podían escuchar hasta en las laderas mas bajas de Monte Cassino,junto a los dementes gimoteos de una ametralladora alemana.
Un par de Falss vigilan el frente
Fuente: http://www.dalvolturnoacassino.it/risor ... d=2&page=3" onclick="window.open(this.href);return false;
La velocidad planeada del ataque ,100 metros cada 10 minutos ,se ralentizo hasta los 100 metros cada hora. Un escuadrón de tanques Sherman también rodaban a poca velocidad hacia Cassino ,cabeceando arriba y abajo a través de los cascotes
como una flotilla en un mar tormentoso ,según lo describía la historia oficial de Nueva Zelanda. Los tripulantes desmontaban armados de picos y palas y despejaban la carretera ,lo que les permitía avanzar unos pocos metros ,tan solo para encontrar cráteres de bombas tan profundos ,tan anchos y tan numerosos que los zapadores se veían obligados a construir puentes sobre ellos ,algunos de hasta 26 metros de largo. Tras inspeccionar el paisaje lleno de socavones ,ahora azotado con violencia por el fuego a discreción procedente de la cara este de Monte Cassino ,los zapadores neozelandeses calcularon que,con ayuda de las excavadoras tardarían 2 dias en abrir un camino hasta el centro de la ciudad ,incluso en tiempos de paz.”
Fuente: "El dia de la batalla " Ritck Atkinson Editorial Critica Pag 705 a 707
Saludos
Una vision; un propósito;un sueño...Siempre.