Kiev 1941. David Stahel
Publicado: Sab Mar 10, 2012 1:24 pm
Queridos compañeros de foro, me gustaría compartir con vosotros un comentario sobre el último libro que he leido.
fuente http://ecx.images-amazon.com/images/I/5 ... 3,200_.jpg
Segundo libro de Stahel, otra vez centrado en Barbarroja, donde el autor se plantea como objetivos tratar de forma intensiva la batalla de Kiev y trazar el curso de la debacle de la Wehrmacht en el verano-otoño de 1941, hasta el comienzo de Tifón.
Otra vez, como en su anterior libro, Stahel comienza fuerte, con una deliciosa introducción, analizando la bibliografía en torno a la batalla de Kiev, y en general en torno a Barbarroja. Un par de capítulos analizan la situación internacional, para poner en contexto la situación, con datos aplastantes como por ejemplo la capacidad de reponer bajas de los soviéticos (40 nuevos ejércitos en sólo seis meses!), o la edad media de las poblaciones rusa y alemana: el 45 % en Rusia era menor de 20 años, y el 33% en Alemania. Yo creo que Stahel tiene una fuerte vocación didáctica en su escribir, ya que las explicaciones son muy elaboradas y a la vez sencillamente explicadas. Es muy dado asimismo a ir siempre revisando la historiografía de los aspectos que va tocando: analizando lo que hay escrito con nombres y apellidos, para valorarlo, ponderarlo y finalmente dar a conocer su parecer. Esto es una tónica en todo el libro. Por ejemplo, en los capítulos introductorios, presenta de forma sencillísima las diferentes interpretaciones sobre la economía alemana en los primeros años de guerra, comparando las tres teorías más en boga hasta el momento: la de Milward, presentada en su War , Economy and Society, la de Tooze (Wages of Destruction) y la de Müller (presente en el 5º volumen de la historia del MGFA). Así pues, antes de dar comienzo la batalla en sí el libro ya cumple con mis expectativas.
Entrando en la batalla que da nombre al libro, Stahel argumenta que , si bien para el 10 de Julio del 41 el III Panzer Korps de MAckensen ya está cerca de Kiev, el hecho de pensar hoy día que podría haber sido tomada entonces es un tanto irrealista: “Las decisiones concernientes a la captura de Kiev han generado siempre debates desde la Guerra, tratándola como una oportunidad perdida. Aunque estas nociones, como otros escenarios what if ganan esta credibilidad desde un ilusorio optimismo expresado por el generalato alemán. Por ejemplo, Kiev, situado en la curva de un río mayor, como Stalingrado con 850.000 habitantes, está construido en su mayoría en el banco oeste del río : hacerse con la ciudad sin obtener mucha resistencia iba a ser improbable. Kiev tenía más habitantes que Stalingrado, y además estaba unido muy bien por tren con el este… ahora la importancia de Kiev crecía como punto de concentración de tropas de Kirponos… Dada la subsecuente sabida dificultad del combate urbano contra los soviéticos… incluso la combinación de unas cuantas unidades del 6º ejército con el III cuerpo de Mackensen hubiera devenido en fracaso. De hecho, a finales de Julio y principios de Agosto, hubo numerosos infructuosos intentos por parte del XXIX Cuerpo de Ejército de Reichenau con hacerse con Kiev, lo que subraya lo difícil de la tarea… La lucha en ciudades, incluso en centros con menor población como Odessa, Dnepropetrovsk y Sevastapol, demostrarían tanto el extraordinario coste como lo inadecuado de los recursos y material alemanes.”
Enfrascados en una difícil situación en el grupo de Ejércitos Centro en las batallas en torno al norte y sur de Smolensk y en un entorno de indecisión generalizada en el frente del Este, con fuertes disensiones entr el OKH y Hitler, Guderian visita a Hitler para discutir la situación estratégica y vuelve con la opinión de lado de Hitler. ¿Qué ventajas va a presentar el ataque hacia el sur? En primer lugar, el ataque alemán va a tocar puntos débiles de los soviéticos ya que Stalin había revisto que Hitler atacaría hacia Moscú, y allí estaba el grueso de sus tropas. Y en segundo lugar, el tamaño del área operacional: A no ser que los rusos se retiraran hacia el este (cosa que defiende Zukhov , y le cuesta el cargo) sería fácil atrapar a muchos soldados.
Al igual que en su anterior trabajo, las disputas entre los distintos generales de los Grupos de Ejércitos, de los Grupos Panzers (especialmente Guderian), y de los ejércitos forman parte del núcleo del libro, de su valor como documento. A mí personalmente es lo que más me ha gustado de este libro. Aquí la palma se la llevan Guderian y Bock. Claramente se percibe que Guderian es un protegido de Hitler, y que el apoyo del primero al último en su ataque hacia el sur no hace más que reforzar este argumento. Guderian cae en insubordinación flagrante en más de una ocasión, cosa que Bock tiene que dejar pasar, sin más.
En cuanto a la batalla de Kiev en sí, Stahel se propone dos objetivos concretos: Uno, mostrar la precariedad del avance de las pinzas que van a cerrarse en torno al frente Suroeste de Kirponos, por el norte Guderian, con el XXIV PZ Korps como punta de lanza y por el sur Kleist, con el primer Grupo Panzer. Y otro, el altísimo coste que supone para los alemanes acabar con los focos de resistencia soviética una vez cerrado el cerco, lo que va a condicionar Tifón.
También es cierto que Stalin ayuda mucho a los alemanes negándose en redondo a retirar las tropas hacia el este, lo que facilita la tarea para los alemanes.
Este es el valor del libro como aporte a la batalla de Kiev, en mi humilde opinión.
Después de Kiev, otra vez la paradoja eterna del alemán en Rusia: “Un éxito operacional no trae un éxito estratégico”. Y tomando prestadas las palabras de Michael Wildt (“An uncompromising generation”, sobre los altos cargos del RSHA), la no consecución de un objetivo lleva a buscar otra solución aún más grandiosa, y más difícil de conseguir, y más radical: Tifón.
El título del libro no hace justicia a su contenido, y algo de márketing veo yo detrás de esto: Stahel contempla muchos más aspectos que la batalla de Kiev: la situación previa en el Grupo de Ejércitos Centro es analizada con detalle, así como la preparación de Tifón: con mucho lujo de detalle. Para el comienzo de Tifón, o el ataque sobre Moscú, Bock va a contar con todo lo que hay disponible, básicamente. El primer gran problema que Stahel explica es que las distancias que cuerpos de ejército enteros tienen que recorrer son terroríficas. Todo esto lo cuenta con todo lujo de detalles, grupo panzer por grupo panzer, e incluso división por división (chapeau). Y esto con unos problemas logísticos horribles: Por ejemplo, se pregunta Stahel: si la 4ª div Panzer , perteneciente al XXIV Panzer Korps tiene como objetivo final Moscú, que queda a cientos de km, ¿cómo va a llegar si sólo tiene gasolina para dos días? Sin duda alguna, la logística es el eje en torno al cual Stahel argumenta las limitaciones de la Wehrmacht tanto en este libro como en el anterior.
Creo ver que Stahel tiene claro que una historia de la guerra en el este no puede desligarse de las atrocidades cometidas por el ejército en este escenario bélico, no son acontecimientos aislados de la guerra, sino que trata de hacer ver que son algo consustancial, con lo que los oficiales del Heer también están comprometidos.
En general el libro es maravilloso: sí le pondría dos pequeñas faltas: la primera el título, que creo que no hace justicia en realidad a cuantos temas ,interesantísimos eso sí , cuenta. Y en segundo lugar, y ya lo percibí en su primer trabajo, la verdad es que ningunea el genio operacional alemán que, al fin y al cabo, ahí queda para la posteridad. Aunque supongo que Stahel me daría como respuesta que de eso ya se ha escrito muchísimo, y que hay evidencias. De lo que no había tantas evidencias es de muchas cosas que él cuenta.
Actualmente el autor prepara un volumen sobre Tifón. Estaremos atentos a su publicación.
Kiev, derrota personal de Stalin, victoria personal de Hitler. Bravo, Stahel.
Saludos.
fuente http://ecx.images-amazon.com/images/I/5 ... 3,200_.jpg
Segundo libro de Stahel, otra vez centrado en Barbarroja, donde el autor se plantea como objetivos tratar de forma intensiva la batalla de Kiev y trazar el curso de la debacle de la Wehrmacht en el verano-otoño de 1941, hasta el comienzo de Tifón.
Otra vez, como en su anterior libro, Stahel comienza fuerte, con una deliciosa introducción, analizando la bibliografía en torno a la batalla de Kiev, y en general en torno a Barbarroja. Un par de capítulos analizan la situación internacional, para poner en contexto la situación, con datos aplastantes como por ejemplo la capacidad de reponer bajas de los soviéticos (40 nuevos ejércitos en sólo seis meses!), o la edad media de las poblaciones rusa y alemana: el 45 % en Rusia era menor de 20 años, y el 33% en Alemania. Yo creo que Stahel tiene una fuerte vocación didáctica en su escribir, ya que las explicaciones son muy elaboradas y a la vez sencillamente explicadas. Es muy dado asimismo a ir siempre revisando la historiografía de los aspectos que va tocando: analizando lo que hay escrito con nombres y apellidos, para valorarlo, ponderarlo y finalmente dar a conocer su parecer. Esto es una tónica en todo el libro. Por ejemplo, en los capítulos introductorios, presenta de forma sencillísima las diferentes interpretaciones sobre la economía alemana en los primeros años de guerra, comparando las tres teorías más en boga hasta el momento: la de Milward, presentada en su War , Economy and Society, la de Tooze (Wages of Destruction) y la de Müller (presente en el 5º volumen de la historia del MGFA). Así pues, antes de dar comienzo la batalla en sí el libro ya cumple con mis expectativas.
Entrando en la batalla que da nombre al libro, Stahel argumenta que , si bien para el 10 de Julio del 41 el III Panzer Korps de MAckensen ya está cerca de Kiev, el hecho de pensar hoy día que podría haber sido tomada entonces es un tanto irrealista: “Las decisiones concernientes a la captura de Kiev han generado siempre debates desde la Guerra, tratándola como una oportunidad perdida. Aunque estas nociones, como otros escenarios what if ganan esta credibilidad desde un ilusorio optimismo expresado por el generalato alemán. Por ejemplo, Kiev, situado en la curva de un río mayor, como Stalingrado con 850.000 habitantes, está construido en su mayoría en el banco oeste del río : hacerse con la ciudad sin obtener mucha resistencia iba a ser improbable. Kiev tenía más habitantes que Stalingrado, y además estaba unido muy bien por tren con el este… ahora la importancia de Kiev crecía como punto de concentración de tropas de Kirponos… Dada la subsecuente sabida dificultad del combate urbano contra los soviéticos… incluso la combinación de unas cuantas unidades del 6º ejército con el III cuerpo de Mackensen hubiera devenido en fracaso. De hecho, a finales de Julio y principios de Agosto, hubo numerosos infructuosos intentos por parte del XXIX Cuerpo de Ejército de Reichenau con hacerse con Kiev, lo que subraya lo difícil de la tarea… La lucha en ciudades, incluso en centros con menor población como Odessa, Dnepropetrovsk y Sevastapol, demostrarían tanto el extraordinario coste como lo inadecuado de los recursos y material alemanes.”
Enfrascados en una difícil situación en el grupo de Ejércitos Centro en las batallas en torno al norte y sur de Smolensk y en un entorno de indecisión generalizada en el frente del Este, con fuertes disensiones entr el OKH y Hitler, Guderian visita a Hitler para discutir la situación estratégica y vuelve con la opinión de lado de Hitler. ¿Qué ventajas va a presentar el ataque hacia el sur? En primer lugar, el ataque alemán va a tocar puntos débiles de los soviéticos ya que Stalin había revisto que Hitler atacaría hacia Moscú, y allí estaba el grueso de sus tropas. Y en segundo lugar, el tamaño del área operacional: A no ser que los rusos se retiraran hacia el este (cosa que defiende Zukhov , y le cuesta el cargo) sería fácil atrapar a muchos soldados.
Al igual que en su anterior trabajo, las disputas entre los distintos generales de los Grupos de Ejércitos, de los Grupos Panzers (especialmente Guderian), y de los ejércitos forman parte del núcleo del libro, de su valor como documento. A mí personalmente es lo que más me ha gustado de este libro. Aquí la palma se la llevan Guderian y Bock. Claramente se percibe que Guderian es un protegido de Hitler, y que el apoyo del primero al último en su ataque hacia el sur no hace más que reforzar este argumento. Guderian cae en insubordinación flagrante en más de una ocasión, cosa que Bock tiene que dejar pasar, sin más.
En cuanto a la batalla de Kiev en sí, Stahel se propone dos objetivos concretos: Uno, mostrar la precariedad del avance de las pinzas que van a cerrarse en torno al frente Suroeste de Kirponos, por el norte Guderian, con el XXIV PZ Korps como punta de lanza y por el sur Kleist, con el primer Grupo Panzer. Y otro, el altísimo coste que supone para los alemanes acabar con los focos de resistencia soviética una vez cerrado el cerco, lo que va a condicionar Tifón.
También es cierto que Stalin ayuda mucho a los alemanes negándose en redondo a retirar las tropas hacia el este, lo que facilita la tarea para los alemanes.
Este es el valor del libro como aporte a la batalla de Kiev, en mi humilde opinión.
Después de Kiev, otra vez la paradoja eterna del alemán en Rusia: “Un éxito operacional no trae un éxito estratégico”. Y tomando prestadas las palabras de Michael Wildt (“An uncompromising generation”, sobre los altos cargos del RSHA), la no consecución de un objetivo lleva a buscar otra solución aún más grandiosa, y más difícil de conseguir, y más radical: Tifón.
El título del libro no hace justicia a su contenido, y algo de márketing veo yo detrás de esto: Stahel contempla muchos más aspectos que la batalla de Kiev: la situación previa en el Grupo de Ejércitos Centro es analizada con detalle, así como la preparación de Tifón: con mucho lujo de detalle. Para el comienzo de Tifón, o el ataque sobre Moscú, Bock va a contar con todo lo que hay disponible, básicamente. El primer gran problema que Stahel explica es que las distancias que cuerpos de ejército enteros tienen que recorrer son terroríficas. Todo esto lo cuenta con todo lujo de detalles, grupo panzer por grupo panzer, e incluso división por división (chapeau). Y esto con unos problemas logísticos horribles: Por ejemplo, se pregunta Stahel: si la 4ª div Panzer , perteneciente al XXIV Panzer Korps tiene como objetivo final Moscú, que queda a cientos de km, ¿cómo va a llegar si sólo tiene gasolina para dos días? Sin duda alguna, la logística es el eje en torno al cual Stahel argumenta las limitaciones de la Wehrmacht tanto en este libro como en el anterior.
Creo ver que Stahel tiene claro que una historia de la guerra en el este no puede desligarse de las atrocidades cometidas por el ejército en este escenario bélico, no son acontecimientos aislados de la guerra, sino que trata de hacer ver que son algo consustancial, con lo que los oficiales del Heer también están comprometidos.
En general el libro es maravilloso: sí le pondría dos pequeñas faltas: la primera el título, que creo que no hace justicia en realidad a cuantos temas ,interesantísimos eso sí , cuenta. Y en segundo lugar, y ya lo percibí en su primer trabajo, la verdad es que ningunea el genio operacional alemán que, al fin y al cabo, ahí queda para la posteridad. Aunque supongo que Stahel me daría como respuesta que de eso ya se ha escrito muchísimo, y que hay evidencias. De lo que no había tantas evidencias es de muchas cosas que él cuenta.
Actualmente el autor prepara un volumen sobre Tifón. Estaremos atentos a su publicación.
Kiev, derrota personal de Stalin, victoria personal de Hitler. Bravo, Stahel.
Saludos.