Stalingrad, de Vassili Chuikov.
Nº de páginas: 307 págs.
Encuadernación: Tapa blanda
Editorial: LAVILLE
Lengua: francés
ISBN: 978-2-9535966-1-8
Vaya por delante que desconozco si estas memorias están publicadas en español, en mi caso he utilizado la versión francesa, en inglés es fácil encontrarlas. El hombre que comandó el 62 Ejército soviético en la batalla de Stalingrado y que posteriormente llegó a ser mariscal y héroe de la patria nos dejó dos libros sobre sus recuerdos en la Gran Guerra Patria, como denominan los rusos a la IIGM, referentes a Stalingrado y a la toma final de Berlín. En este caso he comenzado por leer las dedicadas a la ciudad del Volga, allí donde el VI Ejército de Paulus encontró su tumba militar.
Todos hemos leídos más de una obra sobre aquella tremenda batalla de titanes, grandes fueron también sus protagonistas y entre ellos nadie mejor que uno de los grandes artífices de esa numantina defensa, el mariscal Vassili Chuikov( 1917-1972). Es un lujo poder leer las experiencias en primera persona de militares como Chuikov, no son historiadores, no son escritores…pero sus escritos trasmiten algo muy difícil de conseguir desde los ámbitos académicos, el conocimiento in situ del combate, y si hablamos de hacer la guerra no podemos nunca olvidar Stalingrado.
Chuikov en su relato se ha mostrado muy directo en sus vivencias, aunque hay ocasiones donde el lirismo se muestra en toda su extensión, no olvidemos que la base de las victorias soviéticas sobre el enemigo nazi han sido, sin ningún género de duda, logradas con un gran heroísmo de sus tropas aunque para ello haya que maximizar o minimizar según convenga el caso el número de bajas. El mariscal es muy hábil utilizando esos matices mencionados, pero vuelvo a repetir, la rigidez y la tenacidad junto al excelente uso de los medios aplicados tácticamente sobre el escenario de la batalla acabaron por conseguir agotar a las tropas germanas, víctimas ellas también, aunque resulte paradójico, de su obcecado ataque a la ciudad.
El relato, como he comentado, es vivo y apasionante, sobre todo una vez que se llega al escenario principal de la batalla, las mismas calles de Stalingrado, es ahí donde Chuikov nos da una lección de su buen hacer militar y también de lo terrible que resultó frenar a las tropas alemanas. La dureza del combate, los bajas hasta el último hombre, su firme propósito de no dar un paso atrás, el mismo Chuikov se encarga de resaltar numerosas ocasiones que él llegó para quedarse, no había tierras detrás donde poder huir, y¡ hay de quién decidiera optar por la retirada! El 62 Ejército debía para el golpe, llevar a cabo una defensa activa con contraataques que no permitieran descanso a los invasores y, como dijo el gran mariscal…”acercarnos a los alemanes a tiro de granada”, una de las maneras de evitar la superioridad de la Luftwaffe. Había que morir en el campo de batalla lo más junto posible a los alemanes, aquello debía ser una guerra sin cuartel, con una fiereza sin igual y en donde cada soldado pensara que detrás de él sólo existía un precipicio, había que luchar hasta el final.
Chuikov demostró que supo muy bien manejarse en la guerra urbana, supo adaptar su táctica según situación concreta que pudiera ofrecerse, elasticidad en el ataque, con sucesivas líneas de defensa que dificultaba en exceso el avance alemán constituyendo grupos de resistencia dotados de lanzallamas, armas de gran calibre, cañones, morteros y fusiles anticarros, grupos que debían tener al alcance rápidamente acceso a sus fuentes logísticas , no se podía eliminar un blindado sin acercarte lo suficientemente a él como para destruirlo, y es aquí donde la defensa anticarro mediante botellas inflamables o las granadas lanzadas muy cerca constituían la mejor de las tácticas posibles…por supuesto el número de bajas fue tremendo, pero las características de esta batalla urbana así lo demandaban, los soviéticos consiguieron aplicar mejor estos métodos y así lo deja muy claro Chuikov en su relato.
En definitiva, si queréis seguir una crónica detalla hora por hora de la gran batalla de Stalingrado las memorias del mariscal Vassili Chuikov son indispensables.
Fuente imagen: http://www.amazon.fr/Stalingrad-Vassili ... stalingrad
