Röhm, l'homme qui inventa Hitler, de Jean Mabire.
Nº de páginas: 570 págs.
Encuadernación: Tapa blanda
Editorial: Pytheas
Lengua: francés
ISBN: 2-910082-50-4
Año: 1995
Sin duda falta una biografía de Ernst Röhm publicada en castellano, para los que tenemos dificultades con el inglés y nos defendemos con la lengua francesa este libro escrito por Jean Mabire parecía una buena oportunidad para conocer con algo más de detalle la vida de este hombre que tanta influencia tuvo en el auge de Hitler como líder político en la convulsa Alemania de posguerra. Bien, el libro, como casi todos de Jean Mabire, se deja leer, pero aportar y analizar con detalle la vida de Röhm es ya otro cantar. La obra parte prácticamente desde el final de la Primera Guerra Mundial, eso no es un obstáculo, Röhm fue un destacado soldado durante la Gran Guerra, participó activamente en ella y fue herido en varías ocasiones, siendo la cicatriz que quedó en su cara la herida más visible, esta fue producto de su participación en la Batalla de Verdún.
El libro narra toda la vida política de la República de Weimar con Röhm como eje central, pero no hay prácticamente nada que no hayamos podido leer en cualquier otra obra que tenga a este periodo como protagonista, o si acaso cualquier biografía de Hitler, la de Ian Kershaw por ejemplo, puede ofrecernos lo mismo con un mayor análisis.
Me interesaba también conocer la trayectoria de Röhm en Bolivia, su paso por el país andino es lo más destacado de la obra, aunque vuelvo a repetir, sin ser tampoco un análisis muy detallado, hay mucho de superfluo y casi se pasa por encima un periodo de la vida de Röhm que está todavía por descubrir con más precisión.
¿Con qué nos quedamos de esta obra? Principalmente y analizando la figura del biografiado con una cosa muy clara: Ernst Röhm fue siempre un soldado, un guerrero de las trincheras, no un político, además de un militar que quiso hacer la guerra después en las calles y que no tenía otro objetivo que posicionar a sus SA como las fuerzas armadas de la Alemania hitleriana; en cierta manera anhelaba una revolución que sustituyera a la Reichswehr por un nuevo ejército de milicias envueltas en una nueva concepción del mundo, aquel ejército de nobles debían dejar pasar a la nueva hornada de alemanes guerreros. Aunque parezca una paradoja, Röhm había sido un personaje que a pesar de sus poses revolucionarias aceptaba y reverenciaba a la monarquía, en parte se debía a su paso por la Gran Guerra, su sentido del deber, su fidelidad a la bandera por la que había derramado su sangre en la IGM nunca le abandonó, pero con el NSDAP fue derivando hacia posiciones más subversivas…pero jamás abandonó una concepción militar de vida. Este parece ser el mensaje más claro que nos ha dejado esta obra de Jean Mabire, superable seguro por alguna otro trabajo más exhaustivo.
Seguiremos esperando la lectura de una mejor biografía de Ernst Röhm.
Un saludo.El libro narra toda la vida política de la República de Weimar con Röhm como eje central, pero no hay prácticamente nada que no hayamos podido leer en cualquier otra obra que tenga a este periodo como protagonista, o si acaso cualquier biografía de Hitler, la de Ian Kershaw por ejemplo, puede ofrecernos lo mismo con un mayor análisis.
Me interesaba también conocer la trayectoria de Röhm en Bolivia, su paso por el país andino es lo más destacado de la obra, aunque vuelvo a repetir, sin ser tampoco un análisis muy detallado, hay mucho de superfluo y casi se pasa por encima un periodo de la vida de Röhm que está todavía por descubrir con más precisión.
¿Con qué nos quedamos de esta obra? Principalmente y analizando la figura del biografiado con una cosa muy clara: Ernst Röhm fue siempre un soldado, un guerrero de las trincheras, no un político, además de un militar que quiso hacer la guerra después en las calles y que no tenía otro objetivo que posicionar a sus SA como las fuerzas armadas de la Alemania hitleriana; en cierta manera anhelaba una revolución que sustituyera a la Reichswehr por un nuevo ejército de milicias envueltas en una nueva concepción del mundo, aquel ejército de nobles debían dejar pasar a la nueva hornada de alemanes guerreros. Aunque parezca una paradoja, Röhm había sido un personaje que a pesar de sus poses revolucionarias aceptaba y reverenciaba a la monarquía, en parte se debía a su paso por la Gran Guerra, su sentido del deber, su fidelidad a la bandera por la que había derramado su sangre en la IGM nunca le abandonó, pero con el NSDAP fue derivando hacia posiciones más subversivas…pero jamás abandonó una concepción militar de vida. Este parece ser el mensaje más claro que nos ha dejado esta obra de Jean Mabire, superable seguro por alguna otro trabajo más exhaustivo.
Seguiremos esperando la lectura de una mejor biografía de Ernst Röhm.
Fuente imagen: http://www.amazon.fr/R%C3%96HM-LHOMME-I ... ean+mabire