100 CONTRA UNO, de J.Bernardini
Editorial: De Vecchi
Año:1971
ISBN: B-23953-1971
PÁGINAS:208
Hace un par de meses me hice con este libro de lance sobre la guerra ruso-finesa, o guerra de invierno, que se desarrolló entre los meses de nov de 1939 y marzo de 1940. El libro consta de 15 capítulos con una breve, pero muy interesante, introducción donde se repasa la influencia de Suecia y Rusia en la historia de este inhóspito país que es Finlandia.
Son 200 páginas con una tipografía más bien reducida, aunque se lee rápido, la propia acción de la batalla hace que su lectura sea trepidante. El autor, J Bernardini, muestras unas claras simpatías por el país agredido, en este caso Finlandia, y narra con pasión y admiración la tremenda desigual lucha entre estos dos vecinos. La URSS de Stalin pensaba acabar prácticamente en una semana con el país nórdico, su superioridad material y humana la hacían imbatible frente un país con algo menos de 6 millones de habitantes. Eso sí, el miedo a que la guerra degenerara en una guerra de guerrillas estaba latente entre el Estado Mayor ruso, de ahí que la rapidez, en cierta manera la bliztkrieg, fuera la táctica a aplicar con inexcusable efectividad. La mayoría de tropas que iniciaron el ataque aquel 29 de noviembre de 1939 eran de procedencia ucraniana, poco acostumbrada a luchar en un clima tan duro como era Laponia o la misma Carelia , los finlandeses fueron lo suficientemente competentes como para intuir la táctica adecuada a desarrollar en cada terreno para bloquear a la URSS. Las diferencias entre el Norte del país, millares de Km cuadrados de bosques y nieves, frente a un sur más habitado y con el centro industrial asentado en esta zona, hicieron que la guerra se desarrollara de diferente forma según la difícil geografía finlandesa. Para el autor, una de las claves de la resistencia finlandesa estuvo en la incapacidad de la fuerza aérea rusa de destruir al menos el 50% de las fábricas, líneas férreas y ciudades de Finlandia. Si esto hubiera sucedido así, el pequeño país nórdico hubiera sucumbido ante el coloso ruso al no poder abastecer al frente de material bélico. Los rusos solamente consiguieron destruir un 10% de estos objetivos.
El título no puede ser más acertado en este caso, 100 contra uno, para los soviéticos trasladar una o dos divisiones no suponía un hecho de importancia. En cambio, para los finlandeses este hecho podía llegar a ser de tanta importancia que de ello dependía el perder o ganar la guerra.
Los últimos 5 capítulos dejan atrás la guerra de Invierno y se introducen ya de lleno en la IIGM propiamente dicha, analizando el papel de Finlandia en la misma. Aunque interesante también, realmente la base de este libro es la guerra ruso-finlandesa en el invierno de 1939-40.
Un saludo.